Los socios del Gobierno de España ven con buenos ojos la movilización de las 50.000 viviendas de la Sareb destinadas al alquiler asequible, algo que ayudará a los miles de españoles que, debido a la coyuntura económica, se ven apretados a final de mes. Pese a que Unidas Podemos, como EH Bildu, valoran positivamente la medida, también creen que hay un condimento electoral detrás de la medida del Gobierno de Pedro Sánchez. Unidas Podemos cree que esta iniciativa es “electoralista”, puesto que se lleva debatiendo durante varios meses y el PSOE se ha negado en anteriores ocasiones. Ahora, el Gobierno español se ha decantado por aprobarla en las vísperas de las próximas elecciones, las cuales son el 28 de mayo.
El coportavoz de Unidas Podemos, Javier Sánchez-Serna, ha valorado positivamente el hecho de que “las ideas” del partido morado “abran camino”, rebajando el peso que ha tenido el PSOE en esta decisión. El representante de Podemos considera que este anuncio es un “primer paso”, aunque considera que las 50.000 viviendas de la Sareb es una cifra “modesta”. Para Sánchez-Serna se deberían poner “todas” las viviendas del ‘banco malo’ en el mercado. Además de ello, el coportavoz del partido liderado por Ione Belarra ha afeado que el PSOE haya “hecho suyo” una propuesta lanzada por el grupo confederal a la que, precisamente los socialistas, se opusieron hace apenas seis meses.
ERC no aplaude la medida del Gobierno español
En una línea similar a hablarlo el portavoz de Esquerra Republicana (ERC), Gabriel Rufián, quien ha expresado que “duele ver como el PSOE se mueve por emergencia electoral”. El político catalán no está de acuerdo con las fórmulas que quiere utilizar el Gobierno español para ceder estos inmuebles a las Comunidades Autónomas. Para Rufián, la intención del Ejecutivo liderado por Sánchez es poner a la venta de las CC.AA. los inmuebles de la Sareb.
Por su parte, y rompiendo con la opinión de Rufián, Mertxe Aizpurúa, portavoz de EH Bildu, ha dado el visto bueno a la medida propuesta por el Gobierno estatal. Los ‘peros’ de la política vasca están en que la iniciativa llega tarde y cree que detrás de ella hay un motivo electoral. Una opinión que también comparte Mireia Vehí, de la CUP, y Néstor Rego, de BNG, quienes creen que la medida tiene un condimento electoral fuerte, y han recordado que el partido liderado por Sánchez se había opuesto en numerosas ocasiones a la movilización de las viviendas de la Sareb.
El PSOE se opuso a la movilización de viviendas de la Sareb hace seis meses
La medida, lanzada junto a la nueva Ley Vivienda, tiene por objeto hacer más accesible la compra de una vivienda. La Sareb, de la que el FROB tiene más del 50% de la participación, dispone de numerosos inmuebles que, con la iniciativa del Gobierno español, pueden utilizarse para fomentar la emancipación de los más jóvenes de sus hogares y hacer más accesible el alquiler o compra de una vivienda.
Pese a que la iniciativa ha sido bien concedida por Unidas Podemos, socio principal del Gobierno de España, han achacado al Grupo Socialista que hace seis meses se opusiera a la movilización de viviendas, justificando la decisión a la insuficiencia de inmuebles de los que disponía la Sareb para este cometido. Unidas Podemos fue, en ese momento, una de las instigadoras de esta medida, a la cual el PSOE no accedió. Ahora, seis meses más tarde, el Ejecutivo estatal liderado por Pedro Sánchez ha optado por poner en disposición de la ciudadanía hasta 50.000 viviendas de la Sareb, de las cuales, el ‘banco malo’ cuenta con 35.000 construidas y otras 15.000 que se construirán.
Calviño aboga por aprovechar “al cien por cien” los activos del ‘banco malo’
Este martes, la vicepresidenta primera del Gobierno español y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, ha abogado por “aprovechar el cien por cien de los activos” del 'banco malo', incidiendo en la idea de “reconstruir” el parque público de vivienda en España. La titular de Economía también ha remarcado este martes que la nueva estrategia de la Sareb incluye la “cesión de suelos para construir hospitales, escuelas, aparcamientos y otros servicios públicos”.
La idea es poner esas 50.000 viviendas en el mercado, con unos precios asequibles para los consumidores. Esta medida se da en un contexto en el que, por un lado, el mercado inmobiliario sigue apretado, con unos precios para el alquiler desorbitados en las principales ciudades, algo que ha llevado al Ejecutivo estatal a fomentar la nueva Ley Vivienda, la cual plantea un tope de subidas del alquiler del 3% en 2023, además de la creación de un nuevo índice ajeno al IPC para cuantificar las alzas del alquiler.
Los socios del Gobierno, pese a que algunos ven con buenos ojos la medida planteada por el Gobierno de Sánchez, creen que hay un fuerte condimento electoral en la movilización de las 50.000 viviendas. Está por ver si la medida llega a buen puerto y logra descongestionar el mercado inmobiliario español.