Donald Trump mantiene la guerra comercial abierta con China. El presidente de los Estados Unidos sigue tratando de evitar que el gigante asiático desarrolle chips avanzados, fundamentales para el desarrollo de sistemas de inteligencia artificial o para diseñar semiconductores. Por esta razón, la Administración norteamericana ha ordenado a las empresas de los Estados Unidos que ofrecen este tipo de servicios que dejen de venderlos a los grupos chinos, con la finalidad de dificultar que el gigante asiático desarrolle chips avanzados.
La Oficina de Industria y Seguridad, una rama del Departamento de Comercio de los EE.UU. que supervisa los controles de exportación, emitió la orden a las empresas mediante cartas este miércoles, según adelantó el Financial Times.
Esta medida representa un nuevo esfuerzo de la administración Trump para obstaculizar la capacidad de China de desarrollar chips de inteligencia artificial de vanguardia.
Nvidia responde ante las amenazas de Trump
A principios de abril, la Casa Blanca ya restringió la exportación de los chips de inteligencia artificial (IA) que el gigante tecnológico de los EE.UU. Nvidia fabrica específicamente para Pekín.
También este miércoles, y después de hacerse pública la orden emitida por Donald Trump, el gigante de chips Nvidia advirtió que "perder acceso" en este mercado "beneficiará a sus competidores extranjeros, en China y en todo el mundo". "Las medidas de control de las exportaciones tecnológicas hacia China suponen que el mercado del gigante asiático esté prácticamente cerrado a la industria estadounidense, debilitando así la posición de los Estados Unidos, mientras que se refuerza a los fabricantes chinos en el extranjero al impulsar la innovación", según advirtió el presidente y consejero delegado de Nvidia, Jensen Huang.
Prohibiciones en las exportaciones
En una conferencia después de la publicación de las cuentas de la multinacional, que en su primer trimestre fiscal se anotó un beneficio neto de 18.775 millones de dólares (16.531 millones de euros), un 26,2% más, después de ingresar 44.062 millones de dólares (38.795 millones de euros), un 69,2% más que un año antes, el directivo aseguró que China es uno de los mercados de IA más grandes del mundo y la plataforma que gane allí "estará posicionada para liderar en el ámbito mundial".
No obstante, hoy día, después de la introducción de controles en la exportación tecnológica por parte del Gobierno estadounidense, Huang considera que el mercado chino, valorado en 50.000 millones de dólares (44.215 millones de euros), "está prácticamente cerrado a la industria estadounidense" y después de las prohibiciones de exportaciones introducidas desde 2020, la empresa se ha visto forzada a asumir amortizaciones multimillonarias de inventario que no se pueden vender ni reutilizar.