Las pérdidas de las empresas de seguros por catástrofes naturales en el primer semestre del año se situaron en 50.000 millones de dólares (45.500 millones de euros), prácticamente el doble del promedio anual de los últimos diez años en ese mismo periodo.

Las tormentas en Estados Unidos causaron un 68% de estas pérdidas a nivel global (34.000 millones de dólares, 31.800 millones de euros), y el total supone la segunda cifra más alta desde 2011. Además, el terremoto de Turquía y Siria fue el desastre que más pérdidas causó al sector asegurador, por valor de 5.300 millones de dólares (4.800 millones de euros).