Las ventas del sector cerámico español cayeron un 7% por la contracción de la demanda en 2023, hasta los 4.864 millones de euros, como consecuencia de una reducción de la demanda generalizada, especialmente en los mercados internacionales. No obstante, la industria cerámica ha sorteado el año gracias a las políticas de precios de venta y la evolución positiva de determinados costes operativos, fundamentalmente la moderación del precio del gas, han permitido a las compañías del sector mantener los niveles de rentabilidad alcanzados en el ejercicio 2022. Para 2024, el sector cerámico español se centra en la evolución de la demanda y el mantenimiento de un posicionamiento competitivo frente a otras regiones productoras, con particular atención ante la creciente competencia de India, según el último informe de Deloitte. En su conjunto, la industria cerámica española prevé para este año un crecimiento de la demanda en los mercados nacional, europeo y estadounidense, que ayudará a incrementar su resultado bruto de explotación (Ebitda) en un 13,9%.