Abertis no se rinde pese a los años de litigio y la sentencia del Tribunal Supremo de este lunes, que denegó la mayor parte de la indemnización de 4.300 millones que la concesionaria reclamaba por la caída de tráfico en la AP-7.  La concesionaria participada por el grupo italiano Mundys y por el grupo ACS ha respondido este martes con un comunicado en el que asegura que “estudia, en defensa de sus legítimos intereses, las posibles vías de impugnación”. Según ha podido saber ON ECONOMIA, se trata del Tribunal Constitucional y del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) de Estrasburgo.

Acesa, la concesionaria de Abertis que gestionaba la AP-7 norte, la autopista de peaje con mayor tráfico de España, y la AP-2, acudió a la justicia tras el fin del contrato, en 2021, para reclamar por las obras realizadas en los últimos años y, sobre todo, por la caída de tráfico en las autopistas con respecto a lo previsto en el momento de la extensión de la concesión, en buena parte provocada por la pandemia, y que supuso una pérdida de ingresos para Abertis con respecto a lo que se esperaba.

La compañía que dirige José Aljaro reclamaba cerca de 5.400 millones y, en febrero de 2022, el Consejo de Ministros aceptó compensar a Abertis con 1.070 millones por las obras realizadas, pero rechazó el resto, por lo que la empresa presentó la demanda de 4.300 millones. El Supremo dio la razón al Gobierno, no aceptó el cálculo de Abertis y solo estimó el pago de 32,9 millones por algunas obras extraordinarias admitidas por la administración. Pero no reconoció el grueso de la indemnización.

Un impacto de 29 millones en las cuentas y 250 millones en provisiones

En el comunicado de este martes, Abertis “no comparte la interpretación” que hace el Supremo del convenio de la compañía con el Gobierno en 2006, por lo que estudia recurrir a otras instancias. Una de ellas es el Constitucional y otra es el TEDH, si bien se optará entre una u otra. El hándicap, apuntan fuentes del sector, es que los tiempos se alargan mucho, pero la intención de la compañía presidida por Juan Santamaría es llegar hasta el final.

Abertis cifra el impacto de la sentencia del Supremo en 29 millones de euros. Eso es lo que dejará de ganar en los resultados de 2023, que presentará en las próximas semanas, por la decisión judicial con respecto a la indemnización de la AP-7. Además, supondrá una pérdida contable de provisiones de 250 millones de euros y un ingreso de caja neto de 65 millones, como consecuencia de la compensación que sí recibirá por algunas inversiones. El beneficio de ACS, que controla el 50% menos una acción de Abertis, se resentirá en 14,5 millones.