El nuevo convenio colectivo de banca sigue lejos de cerrarse. Pese a que CECA y Unacc -las patronales de las excajas de ahorros y de las cajas rurales- consiguieron un acuerdo en abril. Y pese a que la Asociación Española de Banca (AEB) y los sindicatos se han reunido ya 16 veces desde finales del 2023 y hasta ahora, sigue sin haber acuerdo entre la patronal de banca (que representa a entidades como Santander, Sabadell, BBVA o Bankinter) y los representantes de los trabajadores, que se han emplazado una vez más a una nueva reunión el próximo 23 de julio.
La AEB ofrece una subida salarial del 11% a tres años solo para el salario base (sin complementos), lo mismo que en la última reunión. Y los sindicatos piden que dicha subida sea del 12% y para todos los conceptos salariales, incluyendo los trienios técnicos y de antigüedad. Aunque este no es el principal escollo, la patronal que lidera Alejandra Kindelán ofrece una cláusula de garantía salarial del 65% para 2024 y 2025. Pero los sindicatos piden que esa cláusula aplique a los tres años que dure el nuevo convenio colectivo de banca y aquí es donde siguen atascados.
Los principales sindicatos del sector financiero (FINE, UGT y CCOO) piden una garantía real porque muchos empleados de banca cobran complementos que el propio banco les da o que arrastran de entidades origen. Y cuando hay subidas en convenio, se las descuentan de estos complementos, lo que ha provocado que muchas personas tengan los salarios congelados desde hace años. Por eso quieren que esos complementos también tengan subida.
Por otra parte, la AEB ofrece un día adicional de vacaciones para 2024 y 2025 y los representantes de los trabajadores solicitan que se aplique también en los tres años de convenio. En lo que sí han llegado a acuerdo es en que haya un incremento salarial adicional del 2% si el IPC supera el porcentaje de incremento pactado para cada uno de los años del convenio.
"Lo que nos ofrecen es claramente inferior a lo firmado en el convenio colectivo de Ahorro y Cooperativas, no sabemos que parte de la película se ha perdido esta patronal", comentan desde UGT, donde aseguran que "no van a contribuir a que dentro de un mismo sector" se empiece a competir "vía salarios".
"Son ya 16 reuniones en las que se avanza poco, en contraste a los aumentos de los objetivos de ventas que se les exige a las plantillas de forma diaria y sin respiro. No entendemos esta ralentización en las negociaciones y la resistencia de la AEB a conceder a las plantillas de banca aquello que les corresponde", reclama FINE.