Aena va a iniciar una ronda de contactos con las aerolíneas que operan en España, para consensuar con ellas qué aeropuertos de su red están sobresaturados y necesitan una ampliación. El de Madrid-Barajas ya está rozando su límite de su capacidad y por ello, la compañía ya ha puesto en marcha el plan de ampliación. Sin embargo, este no es un problema exclusivo de este aeródromo.
La propia Aena lleva años advirtiendo que esto también pasará en Barcelona, donde ha intentado ampliar El Prat, de momento, sin éxito. Junto a estos dos aeropuertos, que son los de mayor tráfico del país, la empresa que preside Maurici Lucena ha anunciado su intención de mejorar la infraestructura aeroportuaria en Valencia, Alicante, Mallorca, Lanzarote o Tenerife.
Los aeropuertos españoles acaban de cerrar un 2024 de récord con más de 300 millones de pasajeros. Muchos de ellos han llegado o están a punto de llegar su límite y en épocas como el verano o la Navidad, cuando hay más movimientos, se observan largas colas que no es del agrado de los viajeros ni de las aerolíneas, que son las que reciben las quejas de sus clientes después.
Por todo ello, Aena anuncia que antes de tomar cualquier decisión sobre futuras ampliaciones (dentro de los planes del DORA III, que va del 2027 al 2032) conversará con las líneas aéreas. “Aena va a iniciar una serie de consultas con las aerolíneas para tratar de consensuar cuáles deberían ser las ampliaciones y los refuerzos de capacidad de la densa red de aeropuertos españoles”, anunciaba el presidente y consejero delegado, Maurici Lucena, en un foro empresarial este lunes.
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Lucena se mostraba “optimista”, porque considera que a pesar del boom de pasajeros, Aena podrá mejorar las infraestructuras aeroportuarias y acomodar el "muy fuerte" tráfico futuro. Sobre el tráfico, de hecho, explicaba que en el año 2050, los destinos con mayor turismo del mundo serán Estados Unidos, China, India, Indonesia y España.
Por ello, el sistema aeroportuario español tiene que ser capaz de realizar adecuadamente las ampliaciones de capacidad necesarias para acomodar este turismo. De lo contrario, no solo le irá mal a Aena como empresa, también a “España, su economía, sus territorios y sus ciudadanos”. El presidente de Aena recordaba que el buen funcionamiento de los aeropuertos españoles se debe “en buena media” a una primera ola inversora, la de la primera década del siglo XXI, que ha permitido a líneas aéreas, aeropuertos, hoteleros y restauradores vivir “un boom excepcional”. Para muestra un botón, y es que España lleva años encadenando años récord de visitantes, con excepción de la pandemia.
“Pero la elasticidad tiene un límite y con el siguiente DORA a partir del año 2027 vendrán diez años muy fuertes de ola inversora. Hay aeropuertos que se van a ampliar, como el de Madrid, Málaga, los de la Comunidad Valenciana, Canarias o el norte de España. Pero no quiero ser exhaustivo porque las empresas implicadas en la creación de valor somos muchas”, agregaba.
Maurici Lucena reconocía que el tráfico aéreo récord que se está registrando en España después de la pandemia, ha hecho que algunas infraestructuras estén “apretadas”. Entre ellas, el aeropuerto de Madrid, que alcanzó el año pasado 66 millones de pasajeros y su límite técnico son 70 millones, por lo que está al borde. Por ello, explicaba, se ha empezado ya la ampliación de la T4, de la T4 satélite y de la T1-2-3. “Creo que cuando esté realizado va a fluir mejor el tráfico”.