Amazon cerrará uno de sus centros logísticos de Barcelona, concretamente el de Martorelles, donde tiene 800 trabajadores, y trasladará esta actividad al nuevo centro que abrirá a Zaragoza, que dará trabajo a un millar de personas y que prevé abrir el próximo mes de marzo. En abril, por otra parte, Amazon ha confirmado que abrirá un centro robotizado en el Far de l'Empordà, cerca de Figueres, donde tendrá 1.400 trabajadores y que estaba previsto en principio para el año pasado.
Fuentes de la empresa han asegurado que ofrecerán recolocación "en otros centros del territorio español" a todos los afectados por el cierre, que tienen el seguimiento en la empresa "garantizado". El motivo del cambio es el de tener un centro más modernizado y robotizado, que se especializará en el almacenaje y gestión de productos de pequeño tamaño. Tendrá tecnologías más avanzadas y una superficie de 50.000 metros cuadrados.
Las nuevas aperturas supondrán una creación de hasta 2.500 puestos de trabajo, a los cuales tendrá que restar a los que lleguen en los nuevos centros procedentes de Martorelles. El centro del Far complementará la actividad llevada a cabo en El Prat, que es el más grande de España, y en Castellbisbal.
Desde Comisiones Obreras, en cambio, han emitido un comunicado de rechazo al traslado, que califican como "ERE encubierto". Aseguran que lo que pretende la empresa es "forzar a los trabajadores y trabajadoras a acogerse a convenios de referencia menos ventajosos" o bien forzar bajas voluntarias. Han anunciado que no aceptarán este plan.
Mientras que en el ámbito internacional la empresa anunció la semana pasada que los despidos llegarán a los 18.000 en todo el mundo, en España fuentes de la empresa aseguran mantener su intención de llegar a los 25.000 trabajadores de cara al año 2025.
Actualmente, son 20.000, 7.000 de los cuales en Catalunya. Desde el año 2011, la empresa ha invertido más de 10.500 millones de euros a España y en los últimos dos años, ha abierto más de veinte sedes a todo el estado.
En Catalunya tiene centros logísticos en El Prat y Castellbisbal, al cual se sumará el de El Far de l'Empordà, mientras que tiene un centro de distribución en Barberà, un centro Amazon Fresh en Barcelona y varias estaciones logísticas en el territorio, así como oficinas corporativas y un centro de atención a vendedores en el hub tecnológico de la capital catalana.
La empresa, como muestra el mapa, tiene diez centros logísticos en España: San Fernando de Henares y Alcalá de Henares (en Madrid), El Prat y Castellbisbal (Barcelona) Dos Hermanas, en Sevilla, Murcia, Onda (Castellón) y dos más pequeños en Illescas, Toledo.
Además, cuenta con dos centros de distribución, uno en Getafe, Madrid, y otro en Barberà, Barcelona. También cinco centros Amazon Fresh en Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla y Zaragoza. También tiene un centro de entrega en Coslada y más de 20 estaciones logísticas repartidas por el país.
Los centros logísticos son los de primera milla, es decir, los almacenes de donde parten los productos, mientras que los centros de distribución son los de media milla, un paso intermedio que consolida los paquetes. Las estaciones logísticas, finalmente, son la última milla, desde donde se reparte al cliente final.
Negociación para reubicar a los trabajadores
La reunión en la cual la empresa le ha comunicado a los trabajadores de Martorelles la noticia ha tenido lugar durante la mañana de este miércoles. Fuentes próximas a los trabajadores, que están "en choque", han dicho a ON ECONOMIA que no creen que mucha gente acepte moverse a Zaragoza o Faro del Empordà, como se les ha sugerido desde la empresa. La posibilidad de moverse a centros más próximos se ha puesto sobre la mesa durante la reunión, pero no ha recibido respuesta por parte de los directivos. La mesa de negociación para ver cómo se cierra la salida o recolocación de los trabajadores tiene que empezar la próxima semana y a partir de aquí se perfilarán los detalles que las fuentes consultadas dicen no conocer todavía.
La empresa empezó el año anunciando el futuro cierre de tres grandes almacenes ubicados en Reino Unido, una decisión que afecta directamente a 1.200 trabajadores, tan solo una semana después de anunciar los recortes que afectarán a 18.000 personas.
En Reino Unido la empresa anunció el cierre de tres grandes almacenes, pero también que se compensaría con tres aperturas más
Con todo y con eso, en el caso de Reino Unido no quedó claro tampoco que se tratara de despidos, ya que la empresa anunció que ofrecería al personal trabajar en otros espacios de la compañía en el país y anunció que abrirá tres nuevos centros a lo largo del próximo año. En Reino Unido, Amazon emplea a 7.500 personas.
Los centros de trabajo de Amazon en todo el mundo viven pendientes de los movimientos de la compañía y de si afectarán o no los despidos anunciados, ya que la dirección de la empresa no ha precisado dónde tendrán lugar. Es por eso que cada cierre de un centro, aunque coincida con la apertura de otro, agita el fantasma del despido. Un fantasma que la empresa se apresa a espantar cuando se le pregunta.