La presidenta del Banco Santander ha aprovechado la junta de accionistas celebrada este viernes en Madrid para alejar el miedo sobre un posible contagio en Europa de una crisis como la que han sufrido Silicon Valley Bank o Credit Suisse. La caída de varios bancos en Estados Unidos y el rescate de uno en Suiza ha llevado a la banca europea a varias jornadas de tensión en bolsa, pero "hoy" el sector financiero, los bancos, "se encuentran en una situación sólida, mucho más que hace 15 años. Y los bancos europeos, estamos sujetos a la regulación y supervisión más estricta del mundo", destacaba Ana Botín.
La ejecutiva apoyaba al Banco Central Europeo (BCE), desde donde se ha defendido que la banca europea es sólida y tiene una posición holgada de capital y liquidez con la que poder hacer frente a episodios de volatilidad. En este contexto, Ana Botín ponía en valor "la rápida respuesta" dada por las autoridades en Estados Unidos, Suiza y el Banco Central Europeo, "han sido fundamentales para restablecer las condiciones adecuadas y recuperar la confianza", aseguraba.
Botín cree que la situación actual "es una gran oportunidad para terminar la unión de mercado de capitales y la unión bancaria, con la creación de un fondo europeo de garantía de depósitos. Esta sería la mejor respuesta ante los desafíos de Europa, contribuirá a generar mayor confianza, y sería una gran base para atraer la inversión necesaria para el crecimiento", defendía la banquera.
En lo que respecta al Santander, la presidenta explicaba que "gracias" a su enfoque en banca comercial, la mayoría de sus depósitos proceden de millones de particulares y empresas, en diferentes países, y están respaldados por fondos de garantía de depósitos. En concreto, el banco cántabro tiene cerca de 200.000 millones de euros en efectivo depositados en los bancos centrales, lo que supone casi el 20% de su base de depósitos. Y el 80% de esos depósitos son de clientes minoristas, "lo que da mucha mayor estabilidad".
En los principales mercados del Santander (España, Reino Unido y Estados Unidos) alrededor del 70% están asegurados por los fondos de garantía de depósitos, añadía. La cartera de deuda soberana del banco "está equilibrando el riesgo de interés del balance", explicaba la presidenta, que insistía en que es "pequeña, está diversificada y tiene una duración media de 4 años", por lo que es relativamente nueva. "Esto supone una gran oportunidad de reconstruir estas posiciones con una rentabilidad mucho mayor".
La ejecutiva también ponía en valor la diversificación del Santander, en geografías y en negocios, "aporta estabilidad y nos ha ayudado a construir un balance sólido". Así, la ratio de capital del grupo es superior al 12% y el balance les ha permitido posicionarse "entre los mejores bancos en los test de estrés llevados a cabo por el regulador", la Autoridad Bancaria Europea.
Finalmente, la presidenta del Santander comentaba que situaciones como las vividas por la banca europea y americana en las últimas semanas "recuerdan el gran valor que subyace en los modelos tradicionales de gestión bancaria", como sería su caso, donde la "prudencia" en el control de riesgos, la solvencia y la gestión de los niveles de liquidez, les permite afrontar "profundos cambios y retos".
El consejero delegado de la entidad, Héctor Grisi, también defendía las diferencias que existen entre el modelo de negocio del Santander con respecto a los bancos que han tenido problemas en las últimas semanas en Estados Unidos. "Nosotros contamos con una franquicia consolidada y diversificada. Nuestro negocio se fundamenta en la captación de depósitos en una de las áreas más atractivas del país, como es la costa Noreste, y concedemos créditos principalmente a la financiación de automóviles en todo el territorio a través de nuestros socios".
El mexicano explicaba que la base de depósitos con la que operan en EEUU es fundamentalmente minorista, lo que la hace "más resiliente" a situaciones de salidas abruptas de depósitos. También aquí, el 70% de sus depósitos están asegurados.