El astillero Barcelona Nautic Center, ubicado en el muelle de Llevant del Port de Barcelona, invertirá hasta 8 millones de euros, en varias fases, para ampliar sus instalaciones hasta los 26.000 metros cuadrados, desde los 12.000 m² actuales. Con ello, la concesión total de este varadero, especializado en el mantenimiento y la reparación de barcos a motor y vela, abarcará 18.239 m² de terreno y 7.810 m² de lámina de agua. También incluye los edificios que albergan talleres y oficinas, actualmente con una superficie de 4.000 metros cuadrados.

Las obras en la instalación, que incluye superficie terrestre y lámina de agua, se iniciarán en verano de 2025, "cuando la actividad del varadero es menos intensa", confirma a ON ECONOMIA el director de la compañía, Jordi Martí. El objetivo es que se pongan en marcha las primeras mejoras en 2026 y que se complete todo el proyecto a finales de 2027. Antes de empezar las obras, los responsables y el personal técnico del complejo náutico están ocupados en desmontar la construcción de unos 3.500 m² en el interior del recinto que ha ocupado durante dos años -en una cesión gratuita- el equipo italiano Luna Rossa Pirelli Prada Team que participó en la Copa America de Vela.

El proyecto, aprobado hace unes semanas por el consejo de administración del Port de Barcelona, comporta la extensión de la concesión administrativa por otros 10 años, hasta 2043. La mayoría de las acciones de Barcelona Nautic Center pertenece al grupo empresarial balear de la familia Mayol que asume la gestión ejecutiva del centro, un negocio de poco más de un millón de euros y un beneficio neto de 228.308 euros en 2022, los últimos datos disponibles.

Interior de las instalaciones del Barcelona Nautic Center
Interior de las instalaciones del Barcelona Nautic Center

Barcelona Nautic Center, por su ubicación estratégica, en la entrada de la nueva bocana del Port de Barcelona y junto al puerto Marina Vela, proporciona un entorno ideal para los armadores que “buscan calidad y excelencia técnica”, destaca Martí. El directivo destaca la estructura técnica para la reparación y mantenimiento de las embarcaciones, con un equipo de 8 personas, “al que se incorporará más personal a medida que avance la obra de ampliación; inicialmente pensamos que con 2 ó 3 técnicos más”, asegura.

Para dar todos los servicios necesarios -pintura, mecánica, carpintería, electricidad, electrónica, sistemas hidráulicos o rigging, entre otros-, el centro también se apoya en “proveedores externos locales”, algunos de los cuales se instalan en el mismo recinto. En esta área, la compañía considera que también deberá aumentar sus contratos de servicios con las empresas colaboradoras actuales y "con otras más", para atender a "una demanda creciente que valora la situación del varadero en Barcelona y la existencia de un amplio abanico de servicios de proximidad", destaca.

De 160 a 330 toneladas

La ampliación consolidará la oferta de Barcelona Nautic Center como un astillero de referencia para la reparación y mantenimiento de embarcaciones de pequeña y media eslora, “además de poder acoger a barcos de una dimensión superior”. Se refiere Martí al hecho que se pasará de embarcaciones de 160 toneladas a 330 toneladas y de una manga de 8 metros a 13 metros.

Para ello, se procederá a la sustitución del actual travelift -la grúa pórtico para el desplazamiento y elevación de los barcos- por uno de 330 toneladas de capacidad, para atender a las embarcaciones de mayor tonelaje y una tipología más amplia. Esta actualización mejorará significativamente la flexibilidad operativa de la explanada, optimizando los servicios de mantenimiento y reparación.

Más amarres

En otra de las zonas del recinto se ampliará la lámina de agua, con la incorporación de 22 nuevos amarres para reparación a flote de embarcaciones de entre 12 y 45 metros de eslora, equipados con suministro de agua y electricidad.

Se instalará una grúa de 20 toneladas, diseñada para embarcaciones de menor tonelaje y se construirá un foso de varada para embarcaciones de hasta 13 metros de manga, lo que permitirá dar servicio a catamaranes de hasta 24 metros de eslora.