La banca española ha perdido cerca de 17.000 millones de euros de su valor de mercado a raíz de la quiebra e intervención de Silicon Valley Bank (SBV) y el efecto contagio que han sufrido las bolsas. Desde el viernes, las principales entidades bancarias del país han registrado pérdidas de capitalización abultadas que han llevado al IBEX 35 a caer por debajo de los 9.000 puntos en tan solo dos jornadas.
En este sentido, Banco Sabadell ha sido el más perjudicado, tras caer un 11,8% este lunes y un 16,3% desde que se diera a conocer la crisis bancaria en Estados Unidos. El descenso del precio de sus acciones desde los 1,3 euros hasta los 1,09 euros que marcan al cierre de este lunes supone una pérdida de capitalización para el banco catalán de en torno a 1.200 millones de euros.
Por detrás se sitúan Bankinter y BBVA. La firma que dirige Dolores Dancausa pierde un 8,54% el lunes y un 12,4% en el acumulado, mientras que el banco presidido por Carlos Torres desciende un 8,24% hoy y un 11,3% desde el viernes. Las pérdidas en cuanto a capitalización de mercado se traducen en cifras que rondan los 750 millones y los 5.000 millones de euros, respectivamente.
Otro de los bancos con descensos abultados ha sido Unicaja Banco. La entidad malagueña se deja el 7,78% este lunes, caída que aumenta hasta el 10,1% desde la quiebra e intervención de SBV. De este modo, la pérdida de valor de mercado de Unicaja es cercana a los 320 millones.
Por su parte, el banco que lidera Ana Botín ha perdido este lunes un 7,35%, que asciende hasta el 11,2% desde que comenzara la crisis. En este caso, la pérdida del valor de Santander supera los 7.100 millones de euros. Mientras, CaixaBank, que ha caído este lunes un 6,24% y un 7,9% en el acumulado, se deja por el camino en torno a 2.400 millones de euros. El montante total en términos de pérdida de capitalización de mercado roza los 16.800 millones de euros.
¿Puede haber contagio en Europa?
Cabe destacar que las pérdidas ocurren tras un periodo de ganancias bursátiles en el sector bancario español. Las principales entidades se han visto beneficiadas por las subidas de los tipos de interés de los bancos centrales, por lo que las últimas dos jornadas no borran el recorrido positivo que muchas de ellas llevan registrando en los últimos meses.
Si bien la crisis bancaria ha desatado totas las alarmas y el pánico en los mercados, desde Bruselas no creen que la situación se pueda replicar en los países europeos. De hecho, los mensajes vertidos este lunes por los principales mandatarios han ido en línea con el discurso tranquilizador del presidente de Estados Unidos, Joe Biden. Así, el comisario de Economía, Paolo Gentiloni, ha asegurado que no ve "riesgo específico de contagio" para los bancos europeos.
También desde diferentes firmas de análisis consideran que la situación no es extrapolable a Europa y España. Desde Renta 4, explican que los riesgos son más limitados "en tanto en cuanto hablamos de entidades más diversificadas (no concentradas en un solo sector como el tecnológico). Además, en esta ocasión los bancos están mucho mejor capitalizados que en la gran crisis financiera de 2008". En este sentido, no esperan que afecte de forma financiera en la banca española, pero sí a nivel bursátil. "En todo caso, es previsible que se mantenga la volatilidad hasta que se determine cuáles son todas las derivadas", señalan los expertos.
Más allá de la afectación en el mercado, creen que lo que no es descartable empiecen a cobrar protagonismo temas como "el impacto del tensionamiento monetario en la valoración de los activos", es decir, bancos con significativas pérdidas no realizadas en sus carteras de renta fija, sin problema a vencimiento, pero que pueden provocar un grave problema en momentos de necesidad de liquidez que obligue a su venta a corto plazo. También esperan que se ponga el foco sobre "la creciente presión para incrementar la remuneración de los depósitos en un contexto de atractivas alternativas fuera de balance".