Evo Banco tiene los días contados. Bankinter, su matriz, tiene previsto absorber a sus 430.000 clientes en solo unos meses, en concreto, en el inicio del segundo semestre. Es decir, en julio, casi un año después de que la entidad anunciara su intención de realizar una fusión por absorción del banco digital que compró en 2019.
El inicio del verano es la fecha elegida por el grupo que dirige Gloria Ortiz para la integración de los clientes, lo que implica que las cuentas, las hipotecas, los ahorros, las inversiones y todos los productos que un usuario tenga contratado con Evo Banco, pasarán a manos de Bankinter. En cualquier caso, Evo tiene la obligación -como cualquier otro banco- de avisar con dos meses de antelación de los cambios, como recoge el artículo 22 de la Ley 16/2009, de 13 de noviembre de servicios de pago. Y es que cuando hay fusiones y absorciones suele cambiar el IBAN o número de cuenta, y a veces también las condiciones de las tarjetas o cuentas corrientes.
No es el caso de las hipotecas, la entidad que absorbe tiene la obligación de respetar las condiciones que firmó el cliente, tales como el tipo de interés, el plazo de amortización, las comisiones, los requisitos de bonificación, el importe pendiente o el periodo de devolución.
Precisamente a consecuencia de este preaviso de dos meses que la entidad tiene que respetar, Evo Banco dejará de ofrecer sus productos a nuevos clientes desde el próximo mes de abril, un mes en el que también realizará la fusión efectiva, según el calendario anunciado por Bankinter, que apuntaba a que, tras recibir todas las autorizaciones preceptivas llevarían a cabo la integración legal en la primera parte del año y la integración tecnológica, en la segunda.
Bankinter mantendrá un tiempo la marca Evo
En cuanto a la marca, el grupo ha decidido mantenerla un tiempo, pero puede eliminarla después. Así lo ponía de relieve este jueves la consejera delegada en la junta de accionistas de Bankinter. “En principio, la marca Evo seguirá funcionando hasta que se integren los clientes en la plataforma a principios de segundo semestre, en verano. Evo seguirá siendo un activo en Bankinter y la usaremos si es ventajoso de manera comercial”, explicaba Ortiz.
Respecto a los empleados de Evo Banco, unos 200, se incorporarán también Bankinter, desde donde seguirán desarrollando productos y servicios digitales para todo el grupo, que está presente en España, Portugal y Luxemburgo. El grupo va a crear una sede territorial donde trabajarán los empleados procedentes de Evo cuando los integre y serán ellos los que decidan qué productos lanza al mercado Bankinter en formato digital.
La consejera delegada, que es quien ha tomado esta decisión estratégica, ya explicó en el pasado que con la integración de Evo podrán impulsar productos que ahora mismo comercializa el banco digital y alcanzar a todos los clientes digitales de Bankinter.
Con esta decisión, Bankinter se desmarca de grandes bancos como CaixaBank, el Santander o Abanca que tienen sus bancos digitales, Imagin, Openbank y B100, respectivamente. La entidad naranja defiende que “Bankinter va a ser un banco digital” y no necesita una marca distinta para ello.