Los nuevos trenes de gran capacidad encargados por Renfe para renovar su flota de Cercanías comenzarán operar a partir de 2025 en Barcelona, Madrid y València. Según ha explicado este miércoles el presidente de la compañía pública, Raül Blanco, las primeras unidades del megacontrato de 4.000 millones de Renfe con los fabricantes Stadler y Alstom y CAF para la renovación de la flota de Cercanías y Media Distancia irán destinadas a retirar los principales núcleos de población de España y sustituirán a trenes que en algunos casos tienen hasta 40 años de antigüedad.
Los nuevos trenes de Cercanías tendrán una capacidad de al menos 900 plazas, un 30% más que los actuales, y minimizarán el tiempo de bajada y subida de viajeros mediante un diseño con un mínimo de 10 puertas y amplios vestíbulos. Ello permitirá reducir las paradas y ofrecer más frecuencias. Según Raül Blanco, los trenes incorporan un mantenimiento predictivo que mejora la eficiencia y facilita que los trenes "estén el máximo tiempo posible sobre las vías".
El presidente de Renfe ha visitado este miércoles el centro tecnológico de Stadler Valencia en Albuixech para conocer la imagen de los nuevos trenes, que contarán con wifi, espacio para bicicletas o cochecitos de bebé y serán completamente accesibles. Stadler ha recibido el encargo de fabricar en total 79 trenes de gran capacidad de Cercanías por 1.305 millones de euros. Actualmente se están fabricando las dos primeras unidades, cuyo proceso de validación y certificación comenzará en 2024. Una vez superado este período, se iniciará la producción en serie de las 77 unidades restantes y se entregarán a un ritmo de 2 trenes cada mes. La previsión es que comiencen a circular a principios de 2025.
Paralelamente, la planta de Alstom en Santa Perpètua ya se fabrican las primeras unidades del encargo de 201 trenes para Rodalies y Cercanías por 1.800 millones de euros. Estos trenes se entregarán a un ritmo de tres unidades al mes una vez estén completamente validados a lo largo del próximo año.
Hasta 500 empleos
El encargo a la planta valenciana de Stadler implica la creación de 500 nuevos empleos. Además del material móvil, Renfe ha contratado el mantenimiento para 15 años. Técnicamente, los nuevos vehículos estarán dotados de equipos de última generación que supondrán una mejora de la fiabilidad de la red y la puntualidad del servicio, según ha destacado Renfe. La tecnología implementada permitirá recoger miles de datos por segundo de toda la flota, lo que asegura la toma de decisiones operativas de forma más eficiente.
Locomotoras de Mercancías para el Corredor
Por otro lado, el presidente de Renfe, Raúl Blanco y el presidente de Stadler Valencia, Iñigo Parra, han firmado en la planta de Stadler el contrato de compra y mantenimiento integral de doce Locomotoras de Mercancías con ERTMS y ancho internacional por un importe de 112,9 millones de euros. El plazo de entrega de las locomotoras concluye el 31 de diciembre de 2025.
Renfe prevé destinar las locomotoras contratadas al Corredor Mediterráneo en el que Adif está instalando el Ancho Estándar UIC, lo que va a suponer el aumento de la longitud máxima de los trenes de mercancías hasta 750 metros.