La crisis del gigante chino inmobiliario Evergrande ya se arrastra desde antes del pasado verano. Y ahora ha llegado otro revés. Sus acciones se dejaban más de un 20% en Bolsa a las 8.30 horas de este lunes, hasta los 0,44 dólares hongkoneses (0,052 euros), después de anunciar que el grupo "no puede cumplir los requisitos" para la emisión de nuevos pagarés debido a que una de sus principales filiales, Hengda Real Estate, está siendo investigada.

"Dado que Hengda Real Estate Group Co. Ltd., una filial principal de la compañía, está siendo investigada, el grupo no puede cumplir los requisitos para la emisión de nuevos billetes en las circunstancias actuales", ha publicado la compañía. En agosto, Hengda Real Estate dijo que estaba siendo investigado por el regulador de valores de China por sospecha de violación de la divulgación de información. El desarrollo abre un nuevo frente para la empresa más endeudada del mundo sólo una semana después de que la policía detuviera a algunos empleados de su unidad de gestión de patrimonios, derribando sus acciones y aumentando la presión sobre los planes de reestructuración de Evergrande.

Caen las acciones

Los títulos de la compañía asiática han llegado a caer un 24% en la sesión de este lunes, arrastrando a otras inmobiliarias, como Country Garden (-8,6%) y al propio Hang Seng, el indicador principal de la Bolsa de Hong Kong, que cedía un 1,6%. Evergrande ha recomendado a los titulares de valores de la empresa y a los inversores potenciales de la misma que actúen "con cautela" a la hora de negociar con las acciones de la compañía.

El pasado mes de marzo, la promotora china informó de un plan de reestructuración de su deuda 'offshore', que entonces ascendía aproximadamente a 140.284 millones de yuanes (17.702 millones de euros), que permitiría canjear la deuda por nuevos pagarés de la empresa con distintos vencimientos, entre otras medidas. "La reestructuración propuesta aliviará la presión de endeudamiento en el extranjero de la compañía y facilitará los esfuerzos para reanudar las operaciones y resolver problemas en el país", dijo entonces Evergrande.

Evergrande ya estuvo bajo el foco en 2021 tras conocerse que al menos media docena de empleados amortizaron productos de gestión de patrimonios antes de las fechas previstas, aunque más tarde fueron amonestados y obligados a devolver los fondos. El pasado 18 de agosto, la empresa solicitó la protección del Capítulo 15 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos con el objetivo de proteger los bienes de la compañía en Estados Unidos, mientras se gestionan los acuerdos de reestructuración de la empresa en Hong Kong y las Islas Caimán.

Evergrande estuvo 17 meses suspendida de cotización y regresó a Bolsa el pasado 28 de agosto, tras publicar sus cuentas atrasadas de los ejercicios 2021 y 2022, en los que la compañía registró pérdidas por un importe agregado de 581.211 millones de yuanes (73.369 millones de euros al cambio actual).

El futuro inmediato

Evergrande necesita la aprobación de más del 75% de los titulares de cada clase de deuda para aprobar el plan, que ofrece a los acreedores una cesta de opciones para canjear la deuda por nuevos bonos e instrumentos vinculados a acciones apoyados por sus acciones y las de sus cotizados en Hong Kong. Desarrolladores destacados como Country Garden Holdings siguen tambaleándose cerca del default, manteniendo deprimido el sentimiento de los compradores de viviendas y haciendo que Pekín implemente una serie de medidas para apoyar al sector y estimular la demanda inmobiliaria.

Crisis inmobiliaria china

La crisis del sector inmobiliario, que representa aproximadamente una cuarta parte de la segunda mayor economía del mundo, ha afectado a los mercados mundiales, y las medidas de Pekín para reforzar la industria parecen tener poco impacto hasta ahora. A finales de agosto, la superficie total de viviendas no vendidas era de 648 millones de metros cuadrados (7.000 millones de pies cuadrados), según muestran los últimos datos de la Oficina Nacional de Estadística (NBS).