Como ya había anunciado, este jueves, el BBVA ha procedido al pago de 1.700 millones de euros a sus accionistas, a razón de 0,29 euros por título. Se trata del mayor dividendo a cuenta en la historia de la entidad financiera y supone un aumento del 81% con respecto al dividendo repartido un año antes. El abono ascenderá a 0,2349 euros netos, una vez aplicada la correspondiente retención fiscal. En total, desde 2021, BBVA ha dedicado 15.000 millones de euros a dividendos y recompras.
Este reparto se produce en medio de la opa que BBVA ha anunciado que quiere lanzar sobre el 100% del Banco Sabadell. Según se detalla en la propia oferta pública de adquisición de las acciones, que dio a conocer el pasado mes de mayo, la entidad bilbaína cambiaría las condiciones para los accionistas del banco catalán en función del reparto de dividendos. Por ello, el dividendo abonado este jueves se extenderá a los accionistas de Sabadell que acudan a la opa. En este sentido, recientemente anunció que añadiría, a las condiciones expuestas en el folleto de la opa, un pago en efectivo a los accionistas que vendiesen sus acciones de Sabadell. Asimismo, ha reducido el canje en acciones por el dividendo a cuenta de 0,08 euros por acción -lo que supone un desembolso total de 429 millones de euros--, que la entidad catalana pagó el pasado 1 de octubre, a tenor de 8 céntimos de euro por acción y un 33% más elevado que el del año anterior. En total, el Sabadell prevé remunerar a sus accionistas con 2.900 millones de euros con cargo a los ejercicios 2024 y 2025, lo que equivale a 53 céntimos de euro por acción.
Hasta hoy, el canje de la OPA estaba establecido en una acción de nueva emisión de BBVA por 4,83 acciones de Sabadell. Sin embargo, tras estos repartos, desde hoy el canje pasa a ser un pago en metálico de 0,29 euros por título y una nueva acción de BBVA por 5,0196 acciones de Sabadell.
La política de remuneración al accionista de BBVA contempla un payout de entre el 40% y el 50% del beneficio, lo que significa que del beneficio generado en un ejercicio, entre el 40% y el 50% se destina a retribuir al accionista, que puede combinar el pago de dividendos en efectivo con recompras de acciones. Además, la entidad tiene el compromiso de repartir cualquier exceso de capital por encima del 12% de CET1.
La implementación de esta política se realiza a través de dos pagos: uno a cuenta, habitualmente en octubre, y uno complementario, habitualmente en abril. De forma adicional a la ejecución de esta política, BBVA ha ejecutado recompras extraordinarias de acciones en los últimos años. "BBVA está fuertemente comprometido con la creación de valor para sus accionistas", ha asegurado la entidad en un comunicado, que ha añadido que desde enero de 2019 hasta la actualidad, el retorno total al accionista, considerando tanto la evolución de la acción como los dividendos pagados, casi se ha triplicado (+186%).
La idea del BBVA sigue siendo tomar el control de la entidad catalana si los titulares de al menos el 50% del capital del Sabadell deciden vender, aunque queda por conocer la opinión de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) y las condiciones que podría poner para dar luz verde a la compra.