BBVA quiere reforzar el papel de Barcelona como 'hub' europeo de empresas innovadoras, startups, a través de la opa y fusión con Banco Sabadell, según se detalla en el folleto de la operación que remitió a finales de julio a la SEC, el supervisor de los mercados financieros de EEUU. Este es uno de los puntos que se incluyen dentro del plan estratégico que BBVA está diseñando para poner en marcha una vez se complete la oferta, donde también se incluye la intención de mantener dos centros operativos, la sede de Sabadell en Sant Cugat del Vallés y la de BBVA en Madrid.

Sobre la intención de reforzar el papel de Barcelona como 'hub' de innovación, la entidad liderada por Carlos Torres señala que ambos bancos cuentan con negocios especializados en asesorar y dar apoyo financiero a empresas de nueva creación que tienen un "gran componente" innovadador, es decir, a startups, en todas sus fases de crecimiento. Así, BBVA cuenta con su unidad Spark, mientras que en el caso de Sabadell, el negocio es conocido como BStartup.

Por ello, BBVA defiende que quiere "reforzar" el papel de Barcelona como 'hub' europeo de empresas innovadoras mediante la combinación de ambas iniciativas. Esto incrementaría la presencia en esta ciudad, incluyendo también la promoción de eventos como '4YFN', que se celebra en el marco del Mobile World Congress, o 'BBVA Spark Summit'.

En el mismo apartado del documento sobre la opa, que no está aprobado y está siendo objetivo de revisión por parte de la SEC, BBVA defiende su intención de mantener la vinculación y el compromiso con las regiones de España, especialmente con Catalunya y la Comunidad Valenciana, donde Sabadell tiene mayor presencia. De hecho, señala su idea de utilizar la marca de Sabadell, junto con la de BBVA en aquellos territorios o negocios en lo que pueda haber un interés comercial "relevante".

También quiere mantener el modelo de gestión de riesgos de Sabadell en el negocio de pymes, incluyendo las líneas de circulante para todas estas empresas durante al menos 12 meses, salvo en aquellos casos en los que haya deterioros financieros.

Impacto en el empleo

En cuanto a los planes que el banco tiene sobre el empleo en ambas entidades, BBVA ha declarado ante la SEC su intención de "preservar" el mejor talento y la cultura de los dos bancos. Sin embargo, prevé realizar un ajuste de plantillas, para lo que realizará una "evaluación estratégica y objetiva" del negocio, de actividades, puestos de trabajo y condiciones laborales una vez se produzca la OPA.

El objetivo será evitar "duplicidades innecesarias" de funciones laborales, mejorar la eficiencia operativa y optimizar los recursos corporativos.

Así, se crearía un comité de integración con representantes de ambas entidades que se encargará de diseñar el mejor proceso de integración posible buscando "maximizar" el talento de ambos bancos. Además, en caso de producirse la operación, BBVA iniciaría un proceso de consultas con los sindicatos a fin de minimizar el impacto del ajuste, priorizando, "en la medida de lo posible", las salidas voluntarias y las recolocaciones.

Durante este periodo de consultas, BBVA iniciaría negociaciones para alinear las políticas de recursos humanos de ambas entidades, lo que podría implicar cambios en las condiciones laborales de empleados y directivos de Sabadell.

Más costes de los previstos

Tal y como ya ha ido anunciando BBVA desde que lanzara la oferta en mayo, las sinergias de costes que espera conseguir con esta operación rondarían los 850 millones de euros en España y México. Las sinergias de gastos operativos sería de 750 millones de euros (450 millones por gastos administrativos y de tecnología y 300 millones por ahorros en personal). Los 100 millones restantes serían ahorros en costes de financiación.

La entidad prevé una mayor eficiencia en sus servicios centrales de España y México, mientras que en el Reino Unido no estima ningún ahorro de costes. También ha incluido la previsión de cerrar 300 oficinas en España, lo que supondría menos del 10% de la red combinada de sucursales en España, y que la implementación de las sinergias operativas tardaría unos tres años, materializándose el 25% de las mismas en el primer año.

Para lograr estas sinergias, BBVA estima unos costes totales de reestructuración de unos 1.450 millones de euros brutos. Sin embargo, ante la SEC, ha reconocido unos 350 millones de euros más por la amortización de gastos tecnológicos. En concreto, explica que el coste aumentará unos 70 millones de euros al año por este concepto durante un periodo de cinco años, de tal forma que la factura de la operación se elevaría al menos a los 1.800 millones de euros.

BBVA confía en que habrá fusión

Por otro lado, BBVA ha reconocido que, en caso de salir adelante la opa, pero no consumarse la fusión, no presentará una oferta de exclusión para sacar de negociación las acciones de Sabadell durante al menos 12 meses desde que se cierre la opa.

Sin embargo, defiende que este tipo de fusiones tras la toma de control de una empresa es habitual en operaciones como la oferta de canje y cree que no debería existir ningún motivo por el que la fusión no pudiera producirse. "Además, no hay ninguna operación anterior en la que no se haya aprobado una fusión de este tipo", agrega, antes de afirmar que, en consecuencia, el escenario sin fusión es "muy remoto".