El BBVA se prepara para dar su siguiente paso, hacer oficial la opa hostil sobre el 100% del Banc Sabadell que anunció el pasado 9 de mayo. El banco que preside Carlos Torres y dirige Onur Genç debe presentar en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) la solicitud de autorización. Se trata de un anuncio breve, donde la entidad comunica al mercado que ha enviado al regulador la información necesaria para que el organismo que preside Rodrigo Buenaventura la pueda revisar. Y este anuncio se puede hacer a través de una IR (información relevante) o una OIR (Otra Información Relevante).
De cara a los accionistas, esta solicitud no aporta ninguna información nueva. Los detalles de la oferta llegarán con el folleto de la opa, que el BBVA hará público cuando la CNMV haya aprobado esa solicitud. Según la ley de opas, la solicitud de autorización debe presentarse durante el mes siguiente a la fecha en que se haya hecho pública la decisión de formular la oferta.
Es decir, el BBVA dispone de 30 días para presentarla al mercado. En concreto, hasta el próximo 9 de junio. Pero el presidente ejecutivo del banco, Carlos Torres, ya anunció ante los inversores que su intención era no agotar los plazos y la presentaría “durante la primera mitad del plazo máximo”, es decir, en dos semanas. Esas dos semanas se cumplirían este jueves día 23.
Una vez que la CNMV recibe esta solicitud, se abre un periodo de siete días (que se puede prorrogar otros siete más) para revisar la oferta y aclarar dudas. Después, comunicará al banco si puede seguir adelante con la opa. Aunque su aprobación está condicionada al visto bueno del Banco Central Europeo. No lo puede aprobar uno sin el otro. Cuanto tenga el `sí quiero´ de todos los reguladores, entonces el BBVA procedería entonces a publicar el contenido del folleto de la opa, que suele ser extenso y más detallado.
El propio BBVA anunció que el proceso de la opa puede durar de seis a ocho meses, pues además de la CNMV y el BCE, la operación tiene que contar con el visto bueno de Competencia en España y Reino Unido. Además, el banco necesita el respaldo de sus accionistas para aumentar capital y poder comprar al Sabadell. La oferta realizada por la entidad es un canje de una acción del BBVA por 4,83 acciones del Sabadell, con una prima del 30% sobre los precios de cierre de las dos entidades del pasado 29 de abril.
La opa, que está valorada en unos 12.000 millones de euros, está condicionada también a alcanzar más del 50% de aceptación de los accionistas del Sabadell.