La bicicleta eléctrica de Panot, entre el bicing y la propiedad

Didac Sabaté y Álvaro Ovejero, los fundadores de la firma Panot, están convencidos de que la suscripción es la mejor manera de ofrecer movilidad urbana sostenible y accesible. Por eso, hace justo un año, dieron un giro de estrategia en la gestión de la compañía que crearon en el 2016 y pasaron de ser un operador de movilidad que ofrecía renting de bicicletas eléctricas para flotas de empresas a centrarse en el usuario final. "Ahora somos una empresa de bicicletas eléctricas inteligentes por suscripción, principalmente para particulares que espera cerrar el año con más de 1.500 cuentas activas; los usuarios han recibido la propuesta muy satisfactoriamente con solo un año de su puesta en marcha", confirma Didac Sabaté.

Sin embargo, al mismo tiempo, "estamos detectando que la suscripción también es una opción que despierta el interés de las empresas", añade. Los participantes en l'America's Lagar, los organizadores del Primavera Sound o empresas como Allianz, FAD (Foment de las Artes y del Diseño) y más recientemente BSM (Barcelona Serveis Municipales), son clientes.

Sus creadores han adaptado el negocio a las nuevas formas de consumo que predominan al mundo urbano moderno y a las características de una ciudad como Barcelona, que es hoy por hoy su foco de crecimiento y consolidación. "La ciudad está creciendo en infraestructura y usuarios de la bicicleta, en los cuales Panot los ofrece un producto adecuado para la urbe y que también los proporciona servicios y, a diferencia de otras compañías de suscripción, nuestras bicicletas incorporan tecnología IoT (internet of things) para monitorizar aspectos como los kilómetros recorridos, las emisiones de CO₂ evitadas o las rutas realizadas," destaca Sabaté. En este sentido, la compañía ultima el lanzamiento de su aplicación móvil, que proporcionará al usuario información valiosa y un enfoque lúdico del ciclismo, y a la empresa Panot, la información complementaria para ofrecer un mantenimiento predictivo.

Entre las asignaturas pendientes: que las administraciones, especialmente la local y municipal, pongan normas de circulación claras para la movilidad, "porque sinó la convivencia será cada vez más difícil", manifiesta Sabaté. "Se tiene que educar al usuario de cualquier medio de transportes que tienen que convivir todos ellos", es imprescindible.

Con el negocio danza, Panot prevé facturar un millón de euros en el 2024 -la misma cantidad que llevamos invertida en el proyecto; ¿un punto de inflexión "porque conseguiremos el break even", confirma Sabaté y explica que siempre se han autofinanciado y que llegar al punto de equilibrio los permitirá un mejor acceso a financiación externa o "por qué no?" abrir una ronda de financiación para dar entrada a empresas de movilidad y dar el salto en una segunda ciudad de España.

Didac Sabaté, que asume la dirección general, considera que su modelo tiene un gran recorrido por delante, porque para las generaciones más jóvenes "la propiedad de los vehículos está en declive, dado que -por varias razones- contemplan cada vez menos la adquisición de bienes materiales, no solo por una cuestión económica, sino también por la comodidad y flexibilidad que ofrecen los servicios de suscripción". Estos nuevos consumidores tienen, además, una mayor conciencia social y medioambiental.

Según Sabaté, valoran que Panot los garantice sistemas avanzados antirrobatori y tecnologías de rastreo, de manera que las bicicletas se pueden estacionar en la calle sin preocuparse por el vandalismo o los robos. En caso de robo, la compañía ofrece una bicicleta de sustitución. El usuario también se olvida del mantenimiento de la bicicleta y cuenta con asistencia en caso de incidencias como pinchazos o averías. El hecho de que las bicicletas pertenezcan a "una flota" minimiza mucho el riesgo de los robos y el vandalismo; de hecho, Panot solo tiene contabilizado un 5% de incidencias en el millar de contratos de suscripción que gestiona.

Teniendo en cuenta que Panot no tiene una red de talleres y que solo opera con un establecimiento en la calle Balmes de Barcelona, sus técnicos ofrecen también un servicio de asistencia en el punto donde se encuentre la bicicleta. Un conjunto de servicios a que se accede con la suscripción, que va de los 60 euros para periodos temporales como un mes, hasta los 45 mensuales por un año de suscripción.

La potencia de las Panot Bike es de 80 Nm (motor) y 500 Wh (batería), por lo cual son "perfectos" para la ciudad, y tienen una autonomía de unos 100 km sin necesidad de recarga y cuentan con motor central, freno de disco y ruedas anchas, aspectos que proporcionan mayor estabilidad y seguridad al usuario. Las bicicletas las fabrican en Francia con un proveedor que se adapta al diseño que Panot quiere para sus vehículos urbanos. Son aptos para todo tipo de usuario; "tenemos muchas familias que las utilizan para sus traslados con los niños", porque se ajustan a las necesidades diarias de los usuarios urbanos, que valoran aspectos como la facilidad de uso, la comodidad, el diseño y la versatilidad. Es decir, universitarios, expats, y personas concienciadas en el uso de los transportes alternativos.