BlackRock ha notificado este lunes un aumento de su participación en el Banco Sabadell desde el 3,929% al 6,275%. El gigante norteamericano ha alcanzado así su nivel máximo desde 2010, según consta en los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). El movimiento se produce en un contexto marcado por la opa hostil lanzada por el BBVA para hacerse con la totalidad del banco catalán.
Con esta nueva compra, BlackRock amplía su control en la entidad de la que es el primer accionista. El mayor fondo de inversión del mundo, dirigido por Larry Fink, lleva tomando la iniciativa compradora en Sabadell desde que se conoció la intención del BBVA de comprarlo. Hasta entonces, tenía el 3,62% del capital, y ha ido incrementando su posición hasta el actual 6,2%.
Cabe destacar que BlackRock es también el máximo accionista del BBVA, con un 5,9% del capital bajo su control. La nueva operación del gigante de la inversión le otorga una posición ventajosa en caso de que la opa salga adelante y acuda a ella, puesto que se beneficiaría de la prima que el BBVA ofrece a los accionistas del Sabadell. Esta sería del 30% sobre los precios de cierre de las dos entidades del pasado 29 de abril.
El paquete accionarial que controla BlackRock está dividido en un 6,104% de derechos de voto, unos 332 millones de acciones, y el 0,171% (9,2 millones de acciones) restante en derivados financieros, en este caso contratos por diferencia. A precios actuales, el paquete que posee el fondo de inversión en el Sabadell está valorado en 665.3 millones de euros.
El movimiento accionarial se produce en mitad de la opa hostil anunciada el pasado 9 de mayo, después de que el consejo de administración de la entidad catalana rechazase la oferta amistosa de fusión. Tras el primer intento, el banco que preside Carlos Torres lanzó a los accionistas, incluyendo a BlackRock, la misma oferta que había propuesto al consejo del Sabadell, con el canje de acciones de una acción del BBVA por 4,83 acciones del Sabadell
De esta forma, el BBVA ya ha iniciado los trámites para poder lanzar la opa con la solicitud formal remitida a la CNMV y ha anunciado junta extraordinaria el 5 de julio, donde pretende aprobar una ampliación de capital de 551,9 millones de euros para poder afrontar la operación.
La operación tendrá que pasar también por el visto bueno de las autoridades regulatorias, especialmente por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia. Una aprobación que podría demorarse más de lo previsto de no autorizarse en primera fase, alargándose así hasta un año.