Las bodegas Miguel Torres y los concesionarios de vehículos Nima buscan un socio para salvar a Compartim Turisme Sostenible, la empresa que, con la marca MEC Electric Carsharing, explota desde 2018 un servicio de alquiler de coches eléctricos en la ruta del vino del Penedès y en Barcelona.
Torres y Nima iniciaron hace meses el trámite de liquidación de Compartim Turisme Sostenible por las pérdidas acumuladas, como acaba de publicar el boletín del Registro Mercantil (BORME), pero se han replanteado cerrar este servicio por un inesperado crecimiento de la demanda: en el primer trimestre de este año se ha disparado entre un 25% y un 50% el número de clientes que les alquilan un vehículo eléctrico, según informan fuentes de Torres. Ante esta situación, ambos socios han abierto un paréntesis en busca de un nuevo inversor que les permita mantener este servicio de movilidad sostenible.
Aunque, formalmente, la empresa Compatim Turisme Sostenible se encuentra en fase de liquidación, sigue prestando servicio y la voluntad de sus socios es encontrar un nuevo inversor que garantice su continuidad. En el ejercicio 2022, el último del que pueden consultarse las cuentas, esta empresa facturó 268.000 euros, con unas pérdidas de 21.600 euros. En realidad, en estos años siempre ha cerrado en rojo excepto 2021, aunque los beneficios no alcanzaron los 1.000 euros.
El último informe de gestión destaca que constituyeron esta empresa para ser un "vehículo de economía social" destinado a "la promoción de la movilidad sostenible". Estaba dirigido "a los clientes de la carretera del vino", o sea, a los ciudadanos que visitan las bodegas del Penedès. Pero la actividad principal en la actualidad es el alquiler de todo tipo de vehículos elétricos para cualquier uso en Barcelona. MEC Electric Carsharing cuenta con una flota de más de 40 vehículos eléctricos de la marca Nissan y 14 parkings.

Nima Grupo de Automoción reúne a una treintena de concesionarios, propiedad de los hermanos Nicolás Magriñà, de las marcas Ford, Land Rover, Jaguar, Volvo, Nissan, Audi, Volkswagen y Hyundai. En 2023 facturó 214 millones de euros, con beneficios de 2,86 millones.
Aparte de los talleres y de los concesionarios de vehículos, la familia Nicolás lleva más de cuatro décadas invirtiendo en el mundo del vino. Hace cinco años, se asociaron al viticultor Antonio Rodríguez, de la bodega Bartolomé Vernet, de Bellmunt de Priorat, en un proyecto de recuperación de viñedos antiguos. Con anterioridad, también invirtieron en la bodega Grimau, de Pujades, y en la Masía Torreblanca, de Sant Miquel de Olèrdola, ambas en el Alt Penedès.
Resultados de las bodegas Torres
Las bodegas Torres cerraron 2024 con una facturación de 242,4 millones de euros, que supone una caída del 1,8% con respecto al ejercicio anterior. Este resultado se atribuye a la venta de la filial china en 2023 y a la devaluación del peso chileno, país en el cual poseen negocio.
A finales de 2023, Familia Torres anunció que Miquel Torres Maczassek, de 50 años, sucederá su padre, Miguel Agustín Torres Riera, de 83 años, en la presidencia de estas históricas bodegas, pero se dieron un tiempo de margen superior a un año para preparar la sucesión. Esta todavía no se ha hecho oficial, aunque Miguel Agustín Torres ha dicho en repetidas ocasiones que está a punto para dar paso a la siguiente generación. Esta quinta generación está integrada por tres ramas familiares: los Torres Maczassek –Ana, Mireia y Miquel–, los Torres Rosellón –Marta, Arnau y Pau- y por Cristina, hija de Marimar Torres Riera, que es la que está al frente de las bodegas Marimar Estate, en Estados Unidos.