La Comisión Europea aprobó este martes, de conformidad con el reglamento de concentraciones de la Unión Europea, la adquisición del control conjunto de la empresa BISA por parte de Repsol, ambas empresas españolas, y la suiza Bunge. La operación se refiere principalmente al procesamiento de semillas oleaginosas y a la producción de biodiésel, explica el Ejecutivo comunitario en un comunicado.
La Comisión concluyó que la operación notificada no plantea problemas de competencia, dado su impacto limitado en los mercados en los que las empresas operan. La compra se examinó con arreglo al procedimiento normal de revisión de concentraciones.
La operación consiste en la adquisición por parte de Repsol del 40% del capital social de Bunge Ibérica (BISA) a Koninklijke Bunge B.V (KBBV), una sociedad controlada por Bunge Global. A través de esta transacción, Repsol adquirirá una participación del 40% en tres plantas industriales españolas ubicadas en Bilbao, Barcelona y Cartagena.
Estas fábricas son propiedad de BISA y se centran en la molienda de soja, el refinado de aceites vegetales y la producción de biodiésel a partir de aceites vegetales. Aunque Repsol se dedica principalmente al negocio del petróleo, gas y la electricidad, también tiene una división estratégica de energía renovable, incluidos los combustibles renovables, en la que se enmarca la operación aprobada hoy por Bruselas.
Bunge, es una compañía de agronegocios que cotiza en la Bolsa de Nueva York, tiene su sede operativa en St. Louis, Missouri, Estados Unidos (EE. UU.) y se dedica principalmente a la venta de harinas y aceites de semillas oleaginosas, así como otros aceites vegetales. Sin embargo, también vende granos, incluidos maíz, trigo, cebada y productos molidos, como harina de trigo; así como semillas oleaginosas sin procesar y otros productos, según los datos facilitados por la propia compañía a la Comisión Europea.
Por su parte, BISA es una empresa de agronegocios, con sede en Barcelona, que se dedica principalmente al procesamiento de semillas oleaginosas y la producción, distribución y suministro de aceites, grasas y proteínas de origen vegetal; así como a la producción de biodiesel y subproductos relacionados.
La concentración se implementará mediante la adquisición de acciones de conformidad con un contrato de compraventa firmado el 26 de marzo de 2024. La operación dará lugar al control conjunto de BISA por parte de Repsol y Bunge.