La cadena de supermercados Caprabo llega a sus 65 años de historia este jueves con ansias de "reconquistar el mercado catalán gracias a los altos niveles de competitividad alcanzados en los tres años precedentes", cuando la compañía ha ido acompañada de su nuevo socio inversor EP Corporate Group (EPH), el hólding del magnate checo Daniel Křetínský. Habiendo alcanzado una cifra de ventas de 780 millones de euros y un ebitda de 15 millones en 2023, Caprabo ha diseñado un nuevo plan estratégico 2024-2026 con el objetivo de facturar 900 millones, doblar el ebitda a 34 millones y elevar la cuota de mercado en Catalunya del 4,76% actual a un 5%.
Estas proyecciones irán acompañadas de un nuevo plan inversor de 60 millones de euros que se destinará a la apertura de 38 nuevas tiendas (ocho en propiedad y 30 franquiciadas) con preferencia en ubicaciones de municipios de la costa catalana y centros de atracción turística. Con las nuevas aperturas, la cadena sumará 200 empleados a una plantilla global actual de 6.000 personas. En el periodo 2019-2023, el grupo destinó 60 millones de euros para extender y remodelar su red de puntos de venta.
La nueva tienda de L'Illa Diagonal
Del total de recursos a invertir, unos 5 millones se destinarán a una de las remodelaciones de tiendas que han quedado pendientes de la etapa anterior: el establecimiento ubicado en el centro comercial L'Illa Diagonal, en Barcelona, que tiene una superficie de 4.000 metros cuadrados y es la tienda más grande de la cadena y, en cierta manera, el buque insignia de la cadena. "La tienda de L'Illa se convertirá en el mejor exponente del modelo de nueva generación de establecimientos que la compañía ha lanzado este año, con los cambios en dos de Barcelona: Travessera de Gràcia y Josep Tarradellas", ha concretado el director general.
"En 2023 hemos finalizado la actualización de tota la red de supermercados, formada por 300 tiendas repartidas por el territorio catalán -de las cuales 130 son franquicias- y ahora trabajaremos en consolidar el modelo de tienda, con un gran peso de la marca Caprabo, una gran variedad de productos, incremento de los frescos y, por supuesto, seguiremos invirtiendo en el control de los precios desde una posición competitiva dentro del conjunto del sector de la distribución", ha explicado el director general de Caprabo, Edorta Juaristi.
La marca propia llegará al 30%
"Caprabo es la cadena de supermercados con más referencias de surtido por metro cuadrado", ha defendido Juaristi y ha insistido en que la marca propia sigue sumando adeptos, de manera que representa un 28,5% de las ventas totales, dejando el 70% en manos de la marca de fabricante. La cadena potenciará la marca propia de manera que aporte el 30% en 2026, aprovechando las sinergias con el grupo Eroski, de manera que "sigamos dando al consumidor una oferta de precios y servicios que responda a sus necesidades, mediante programas de fidelización, promociones o la tarjeta Club". Los clientes del Club Caprabo llegan al millón de consumidores, mientras que la cadena registra 100.000 ventas diarias en el conjunto de su red de establecimientos. A ello se suma la compra online, en la que Carpabo fue la cadena pionera en España, que comporta el 3% de las ventas. "La media del sector en ventas online ronda el 3% en España", ha comentado Juaristi.
En este sentido, Caprabo valora el esfuerzo que ha realizado en la etapa precedente, en el que se ha conseguido transferir a sus clientes un ahorro en la cesta de la compra de hasta 85 millones de euros, en parte con el descenso de precios de venta en más de 1.800 productos. De manera más concreta, entre las iniciativas de ahorro dirigidas al cliente, destaca el llamado 'plan 2%' que es un descuento que se aplica a comprar superiores a los 50 euros mensuales, los cupones personalizados, precios exclusivos, descuentos directos de hasta un 70%, formatos de compra 2x1, el día sin IVA y descuentos a las familias numerosas.
El objetivo de la nueva etapa "que abre Caprabo nos debe llevar a ser la mejor opción para los consumidores", ha manifestado Javier Amezaga, presidente de Supratuc, la sociedad propietaria de la cadena, cuyo capital está repartido al 50% entre Eroski -que compró el grupo en 2007 a sus fundadores, las familias Carbó, Prat y Botet, de ahí Caprabo- y EP Corporate.