El Cercle d'Economia que preside Jaume Guardiola ha anunciado este martes un plan para fomentar la productividad y la innovación a Catalunya. Por este motivo, han creado un consejo asesor independiente formado por expertos y profesionales de los ámbitos económico, industrial y académico.

Este consejo asesor está formado por José Luis Agell, socio de Pear VC; Oriol Aspachs, director de Economía Española en CaixaBank; Elisenda Bou, emprendedora; Albert Bravo, director de la Innovation Growth Lab; Clara Campas, socia gerente de Asabys Partners; Xavier Ferràs, profesor de Operaciones, Innovación y Data Sciences en Esade; Teresa Garcia-Milà, directora de la Barcelona School of Economics; Josep Maria Martorell, director adjunto del Barcelona Supercomputing Center; Núria Mas, directora del departamento de Economía del Iese; Andreu Mas-Colell, presidente del BIST; Pedro Mier, presidente de Ametic; Miquel Puig Raposo, economista; Pau Relat, CEO de Mate Holding y presidente de Fira de Barcelona; Lluís Torner, director de l'Instituto de Ciencias Fotónicas; y Mariona Vicens, directora de Innovación y Transformación Digital de CaixaBank.

Más adelante se prevé la creación de un consejo institucional, con representantes de la administración, la industria, las universidades y los centros tecnológicos y de investigación|búsqueda. El objetivo es que la Iniciativa por|para la Productividad y la Innovación (IPI), como se llama este plan|plano impulsado desde el Cercle d'Economia, tenga un carácter "transversal y plural". El proyecto también cuenta con una secretaría técnica y dos patrocinadores: Banco Santander y la Fundación para|por la Industria. En estos momentos, la iniciativa cuenta con financiación por|para los próximos tres años.

La Iniciativa por la Productividad y la Innovación quiere promover la transición hacia un "nuevo modelo productivo más eficiente, innovador y sostenible" que garantice el sistema de bienestar, según indicó Jaume Guardiola en rueda de prensa. El objetivo es situar a Catalunya como una de las regiones líderes en innovación en Europa en el año 2030. Por este motivo, se abordarán retos específicos como el déficit de profesionales STEM o la necesidad de incentivar la transferencia tecnológica al mercado.

La iniciativa pone sobre la mesa el problema de la baja productividad en Cataluña, España y Europa, así como la brecha en términos de innovación (inversión en I+D, transferencia tecnológica...) entre Cataluña y las regiones de Europa y el mundo más avanzadas.

La productividad, entendida como PIB o renta generada por hora trabajada, no debería ser sólo una preocupación de los economistas sino de toda la ciudadanía. El crecimiento de la productividad es "imprescindible" para garantizar el crecimiento sostenido de la renta per cápita y del conjunto de la economía; esto incluye el incremento de los salarios, la reducción de horas trabajadas, y la sostenibilidad del sistema de pensiones. Un elevado nivel de productividad es así esencial para reducir el riesgo de pobreza.

En su intervención, el secretario del Cercle d'Economia, Miquel Nadal, ha indicado que el IPI nace con la vocación de ser un Think Tank y un Action Tank porque quieren influir en el diseño de políticas. "Nace con la vocación de tener impacto en las políticas públicas", ha subrayado.

Según los datos expuestos por los impulsores de la IPI, en la última década se observa como la productividad en Catalunya se ha estancado y situado por debajo de los niveles de la UE27 e, incluso, de la media española, con una divergencia creciente respecto a esta primera. Esta "mala evolución" explica por qué el nivel relativo de renta per cápita en Catalunya se encuentra actualmente por debajo de los niveles del año 2000.

A los problemas estructurales europeos, se le suman las problemáticas específicas de la economía catalana, que se encuentra por debajo de la media de la UE en muchos indicadores como el gasto en I+D, sobre todo del sector privado, según los impulsores del plan. El modelo productivo de Cataluña, como el de España, “depende todavía en exceso de sectores de bajo valor añadido, y el crecimiento económico de las últimas dos décadas se explica más por la acumulación de factores de producción (trabajo y capital) , que por mejoras en eficiencia e inversiones en sectores de alto valor añadido”.

Xavier Vives, profesor del Iese especializado en políticas industriales, se ha referido a las inversiones “anómalas” de capitales durante determinados períodos en el inmobiliario que ahora puede ocurrir en el sector turismo.

No todos los mensajes han sido negativos. Jaume Guardiola ha indicado que en los últimos dos o tres años se ha frenado esta declive en productividad. “No debemos caer en un pesimismo estructural. Si le ponen una buena gestión de gobierno, podremos dibujar el camino”, ha indicado.

A preguntas de los periodistas sobre la reducción de la jornada laboral, Xavier Vives ha recordado que esta medida presenta "implicaciones complejas". "Puedes reducir horas cuando eres más productivo, en algunos casos puede ser bueno, pero no se puede hacer por una imposición generalizada", indicó.