Cualquier lego en la materia diría que el coche eléctrico lo lanzó Elon Musk en 2003 con su carismática marca Tesla. Sin embargo, en 1995 nacía en la ciudad china de Shenzhen el gigante BYD (siglas de build your dreams), que compite a cara de perro con la firma estadounidense con sede en Austin (Texas). En el último trimestre del pasado año, los chinos de BYD lideraron las ventas mundiales de coches eléctricos, arrebatando a Tesla su liderato, posibilidad que a Elon Musk —hace solo un par de años— le provocaba la carcajada. El mayor mercado de este tipo de vehículos está en China y los bajos precios de BYD explicaban este cambio en el pódium de superventas.
Sin embargo, la situación ha vuelto a ponerse a favor de Tesla con los datos conocidos del primer trimestre del año: el fabricante estadounidense vendió 386.810 vehículos en los tres primeros meses de 2024, un 20,2% menos que en el trimestre anterior y un 8,5% menos respecto de hace un año. Pero daba el ´sorpasso´ a BYD que en el mismo periodo entregó 300.114 vehículos eléctricos, un 43% menos que las 526.409 unidades vendidas en el anterior periodo de tres meses, cuando superó a Tesla, pero con un crecimiento del 13,4% respecto igual periodo de 2023.
Estos datos entre los grandes competidores mundiales, se producen en un contexto de menor crecimiento, de llegada de nuevos competidores y cuando Tesla se ha lanzado a ofrecer descuentos y poner en marcha automóviles baratos como el Model 2 que rondaría los 25.000 dólares y está previsto que llegue a los clientes en 2025. Esta sería la estrategia de Tesla junto a su irrenunciable taxi autónomo, pese a las continuas dificultades para su puesta en marcha. El fin último del visionario Elon Musk consistiría en crear un competidor sin conductores a la actual plataforma de Uber. “Si alguien no cree que Tesla va a resolver la autonomía, creo que no debería ser inversor en la empresa”, indicó Musk en la reunión con analistas para abordar los resultados del primer trimestre del año.
BYD afronta la competencia de otra manera. Se ha marcado como objetivo exportar medio millón de vehículos a lo largo de este año
De momento, la compañía ya ha empezado con un plan de ajuste del 10% de su actual plantilla que asciende a 140.473 trabajadores. Además, confía en tener todas sus plantas a pleno rendimiento con la fabricación del Model 2 en un claro empeño por reducir sus costes.
BYD afronta la competencia de otra manera. La china quiere aumentar las ventas fuera de sus fronteras y se ha marcado como exportar medio millón de vehículos a lo largo de este año y duplicar esa cifra en 2025. Para ello, planea construir su primera fábrica de automóviles europea en Hungría. Una iniciativa que suena por estos lares tras el acuerdo de otra china, Chery, de empezar a producir vehículos en la antigua factoría de Nissan en Barcelona. El otro punto de apoyo de BYD es aumentar sus vehículos de alta gama para acercarse a los mercados exteriores. Una muestra de ello fue el lanzamiento el pasado mes de febrero de su superdeportivo Yangwang U9, valorado en más de 200.000 dólares, para ponerse a la altura de las ofertas de Ferrari NV y Lamborghini. Los analistas apuntan a que BYD aprovechará su liderazgo en el mercado para financiar su expansión internacional y la creación de productos de mayor margen.
Resultados y comparativa 2024
A comienzo de esta semana, BYD ofreció sus cifras de facturación correspondientes al primer trimestre del año. Alcanzaron los 124.940 millones de yuanes (17.250 millones de dólares), lo que representa un incremento del 3,97% con respecto al mismo periodo del año pasado, según un documento remitido a las autoridades bursátiles, en el que no se especifica el beneficio. En cuanto a Tesla, los ingresos cayeron un 9%, hasta 21.301 millones de dólares y el beneficio se hundió un 55%, hasta 1.129 millones.
Tanto en ventas como en facturación, Tesla y BYD son compañías comparables, pero en el análisis financiero y de valoración, saltan chispas. La china solo gana en número de trabajadores que ascienden a nada menos que a 703.500, frente a los 140.773 de la firma de Musk. Tesla tiene un valor en Bolsa de 574.300 millones de dólares y eso después de perder en el año un 26% de su valor (llegó a pertenecer al grupo de tecnológicas del billón de dólares). Por su parte, BYD capitaliza en el mercado 87.501 millones de dólares (siete veces menos que su competidor) y en el año ha logrado una subida de 13,45%.
Sin duda, Tesla es un fenómeno de expectativas en Wall Street. Así, en comparación con General Motors, vale 10 veces más, pese a que en el primer trimestre del año, la firma de Detroit obtuvo un beneficio de 2.980 millones de dólares (1.129 millones de Tesla).
En cuanto a las recomendaciones, los analistas del consenso de Reuters, se inclinan por comprar en el caso de BYD, mientras que se muestran partidarios de mantener las acciones de Tesla. Sitúan el precio objetivo medio para la china en 288,1 yuanes, frente a los 218 en los que cotiza actualmente, lo que supone un potencial de subida del 32%. En cuanto a Tesla, sus 183 dólares de cotización actual, le dejan sin margen para nuevas alzas… de momento.