La CNMC se ha posicionado este martes sobre los cánones que cobra Adif a las empresas ferroviarias. La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia considera que las tasas que pagan las empresas en España por circular por sus vías, son muy altas, de hecho son las terceras más altas de Europa, solo por detrás de las de Francia y Reino Unido. De manera que ha aprobado nuevos criterios para supervisar dichos cánones y que sean comparables a los de los países de nuestro entorno.

El organismo que preside Cani Fernández se ha pronunciado sobre este asunto en medio del enfrentamiento entre el ministro de Transportes, Óscar Puente, y la operadora francesa Ouigo. El Gobierno español acusa a la empresa francesa de prácticas "desleales" por sus bajos precios en nuestro país e incluso ha amenazado con denunciarla precisamente ante la CNMC.

Además, Puente advirtió recientemente a Ouigo que si no subía los precios, lo tendría "muy en cuenta" en la próxima reunión en la que las operadoras de alta velocidad pidieran al Gobierno que les rebajaran el canon que abonan a Adif por poder circular en España. 

La francesa Ouigo y la italiana Iryo, que son los principales competidores de Renfe en España desde que se liberalizó el sector, han pedido al Gobierno que revise la fórmula con la que Adif aplica los cánones, para poder bajar costes y transportar más viajeros. Si bien, ninguna compañía ferroviaria consigue todavía ser rentable, porque a pesar de que los trenes van llenos, los cánones son muy altos y no pueden obtener beneficios. 

De hecho, el informe publicado este martes por la CNMC indica que los cánones ferroviarios que Adif cobra a los operadores llegaron a representar hasta el 91% del precio de los billetes puestos a la venta por Iryo en 2023 y en torno al 49% en el caso de Ouigo.

Ante la negativa del Gobierno español por revisar la fórmula con la que establece esta tasa, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia ha decidido realizar su propio estudio, que publica hoy. En el mismo señala que los costes directos calculados por Adif para fijar los cánones que cobra a los operadores ferroviarios son "muy superiores" a los de sus homólogos europeos, por lo que ha instado a la empresa pública a reducirlos.

La CNMC entiende que estos cánones "constituyen una de las partidas de costes más importantes para estas empresas y deben ser predecibles para favorecer las inversiones a largo plazo en el sector". De manera que ha aprobado los nuevos criterios para supervisar los cánones ferroviarios.

En concreto, ha desarrollado un modelo econométrico que sigue los estándares internacionales, para "su correcta estimación". La CNMC aplicará dos pruebas para supervisar la legalidad de los recargos de los administradores de infraestructuras.

Por una parte, aplicará un test de eficiencia que evaluará si el reparto entre los diferentes segmentos del mercado ferroviario del coste a recuperar mediante los recargos es eficiente, es decir, que aquellos segmentos con una demanda menos sensible al precio soportan una mayor proporción de los costes que aquellos con una demanda más sensible al precio.

Pero además, llevará a cabo un test de mercado para garantizar que los recargos no reducen la demanda de los segmentos, salvo circunstancias excepcionales como la que se dio en la pandemia de covid-19.

Según explica en una nota, en la primera revisión de los cánones tras la adopción de esta comunicación, el regulador comprobará si los recargos permitirían a un operador eficiente medio ofrecer de forma rentable los servicios necesarios para satisfacer la demanda de movilidad óptima de cada segmento, determinada en el estudio de mercado que deben elaborar los administradores de infraestructuras.