La bodega Raventós Codorníu ha asegurado este martes que no tomará medidas laborales como la presentación de expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) por los problemas ocasionados por la sequía, como si ha sucedido al grupo Freixenet. La situación de sequía es una preocupación también para las cavas Raventós Codorníu, pero "afortunadamente, tenemos otro escenario empresarial", han asegurado a ON ECONOMIA, fuentes de la compañía. "Afortunadamente, no se prevén medidas de esta repercusión en Raventós Codorníu, a pesar de la situación volátil por la cual pasa el sector", han manifestado.

En este sentido, el grupo Codorníu admite que ha hecho aprovisionamiento de uva para poder asegurar la elaboración de cava y su distribución tanto a España como a los mercados internacionales. "Tenemos el producto asegurado para los próximos años", añaden. Argumentan también que las razones para poder hacer frente a esta situación de sequía y a sus impactos "que todo el mundo comparte" es que en Raventós Codorníu se ha hecho "una buena gestión interna del negocio, una buena planificación en la compra de uva y se han mantenido y potenciado los contratos estables con más de 300 familias de viticultores del Penedès durante generaciones".

Esta estrategia ha permitido, según manifiestan, llegar a la actual situación con un bueno y positivo posicionamiento empresarial, que se refleja en un crecimiento de ventas a un dígito y de doble dígito en el resultado operativo (ebitda) versus año anterior. A la espera de que el grupo concrete estos porcentajes y los datos que hay detrás en el balance del primer semestre de su ejercicio fiscal (a junio de 2024), el grupo se remite a los resultados del ejercicio 2022-2023, en el que registró un incremento de las ventas del 4%, hasta 227 millones de euros y un crecimiento del 16% en el resultado operativo, "los mejores resultados de la década", reconocieron. "Es una muestra de la buena salud con que operamos como empresa", defienden.

Actuar en la situación de Freixenet

Desde hace meses el sector del cava advierte de la reducción de la producción, y la situación que se ha creado a Freixenet, bodega del grupo alemán Henkell Freixenet, ha disparado las alarmas este lunes, después de que el grupo anunciara que la extrema situación empresarial lo vertía a presentar un ERTE para 615 empleados. El grupo explicó que el ERTE por fuerza mayor es una medida excepcional que se enmarca en el actual contexto de crisis provocada por la falta de uva derivada de la fuerte sequía que ha afectado al sector desde 2021, con especial afectación en el 2023 en la zona del Penedès. "La medida, implementada como un ejercicio de responsabilidad, tiene por objeto garantizar la operatividad del negocio y preservar la empleabilidad para poder hacer frente a causas externas y de fuerza mayor provocadas por la grave sequía", destacó a Freixenet.

Este martes, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) del gobierno de España ha dicho que tiene previsto reunirse con Freixenet, para hacer frente a la situación. La producción de cava está situada en Catalunya en una zona donde más afectada está por la sequía. Desde hace meses el sector del cava advierte de la reducción de la producción, por eso se están analizando mesuradas", ha señalado Fernando Miranda.

Freixenet ya advirtió de los problemas que atravesaba a Catalunya, hace pocos días, cuando comunicó sus resultados anuales. El grupo manifestó su "preocupación" a causa de la incertidumbre provocada por la falta de uva derivada de la fuerte sequía que nos afecta desde el 2021 y con especial afectación en el 2023 en la zona del Penedès", afirmó Pedro Ferrer, co-consejero delegado del grupo Freixenet. Ferrer concretaba que, "viendo que la demanda mundial de cava está creciendo y que no podemos producir bastantes botellas para satisfacerla adecuadamente a corto plazo, la situación será realmente complicada a todos los niveles". "Es por eso, añadía, que trabajamos conjuntamente con el sector para garantizar la sostenibilidad del ecosistema que supone el cava y su importancia fundamental en el territorio".

El grupo cerró el ejercicio 2023 con unos ingresos de 1.230 millones de euros (excluidos los impuestos especiales), gracias al incremento del 11% de la marca de prosecco Mionetto y del 4% con el cava Freixenet. Mientras que, la venta de vinos cayó un 8% el año pasado.

CCOO pide medidas

CCOO de Catalunya ha pedido este martes a la dirección de Freixenet que retire el expediente de regulación temporal de empleo (ERTE), que presentó ayer y que afecta hasta 615 personas, y que se siente a negociar las medidas a tomar para afrontar la situación del sector, "salvaguardando el empleo". Según el sindicato, CCOO está denunciando desde hace meses la situación que sufre el sector del cava a causa de la sequía que está afectando gravemente a los cultivos de viña. CCOO reitera que hace varios años que las vendimias están sufriendo la falta de lluvias y el cambio climático y, según parece, estas dificultades se mantendrán en el futuro. Por eso, el sindicato pide al Consejo Regulador del Cava que trabaje conjuntamente con todos los agentes que componen el sector para buscar las soluciones necesarias y flexibilizar el marco normativo para la elaboración del cava, a causa de la situación de sequía.

Delante de este escenario, CCOO considera "crucial" ajustar el reglamento de elaboración del cava y dotarlo de la flexibilidad que tienen otras denominaciones de origen del país y de ámbito internacional para paliar los problemas que implica la sequía. "Eso es fundamental para preservar el futuro del sector y el empleo de las personas que trabajan", continúa el comunicado de CCOO, que considera que es un cambio que tendría que aplicarse en situaciones excepcionales como el actual para no perjudicar los trabajadores ni la calidad del producto.