Los sindicatos de Danone han desconvocado la huelga de 11 días que arrancó el pasado sábado como protesta ante las condiciones para el expediente de regulación de empleo (ERE) propuesto por la empresa para los 157 trabajadores de la fábrica. Tras horas de negociación en una mediación en la sede del Departament de Treball en la noche del lunes, el principio de acuerdo debe sellarse con la votación de los trabajadores en asamblea este miércoles.
Las prejubilaciones de 33 empleados a partir de 55 años, el plan de indemnizaciones por despido y el traslado de 37 trabajadores a la planta de Aldaia están entre los puntos del acuerdo alcanzado, que fue celebrado por los sindicatos.
"La empresa quería cerrar, nos lo ha dicho en todas las reuniones, y nosotros hemos luchado por el no cierre, pero también hemos hecho una negociación basada en cuatro ideas, las prejubilaciones, los indemnizados, las recolocaciones y los que quisieran llevar a cabo proyectos personales", explicó en declaraciones a la ACN el presidente del comité de empresa, Jordi Barragan.
"No hemos rebajado nuestra propuesta y la empresa se ha ido aproximando, y por la tarde hemos conseguido el entendimiento que nos ha llevado a firmar el preacuerdo", relata Barragan. Después de las asambleas informativas de este martes, los trabajadores estarán llamados el miércoles a votaciones para ratificar o no este preacuerdo, un resultado que se prevé que no se conozca hasta muy entrada la noche.
El pulso arrancó a mediados de enero, cuando la empresa anunció que cerraría su planta de Parets del Vallès, con más de 40 años de antigüedad, por la caída de las ventas y la recolocación de procesos productivos. Parte de la maquinaria, de hecho, se trasladará a la planta de Aldaia, en Valencia, junto a la de Tres Cantos en Madrid, las únicas que quedarán activas tras tres cierres en tan solo diez años.
El futuro de los trabajadores dependerá también en parte del proceso de venta de la planta, que está a cargo de la empresa LHH, que ya consiguió que la planta que cerró en Salas en 2022, en Asturias, fuera vendida a una empresa de lácteos holandesa, Royal A-Ware, que debe recolocar a toda la plantilla este mismo año.
La empresa negocia con hasta 10 potenciales compradores, 3 de ellos más avanzados, la venta de la planta de Parets. Los trabajadores prefieren una venta a una empresa de similares características para poder acomodar a la plantilla.