La compañía de arroz y pasta Ebro Foods considera que la contención de precios tanto en costes energéticos como en varias de las materias primas que emplea para la producción de sus productos facilitará que el precio de venta se estabilice y descarta nuevas subidas de precios. El fabricante de marcas como los arroces SOS y Brillante ha precisado que esta será su política en lo que queda de año, coincidiendo con la presentación de los resultados trimestrales. Entre enero y septiembre, Ebro Foods ha elevado un 60,9% su beneficio en los nueve primeros meses del año, hasta alcanzar los 140,1 millones de euros, según ha informado la multinacional en un comunicado.
En concreto, el fabricante de SOS y Brillante ha precisado que este crecimiento se debe a que en el mismo trimestre de 2022 se recogía la pérdida extraordinaria de 20 millones de euros derivada de la venta del negocio de Roland Monterrat y también recoge un beneficio de 1,8 millones de euros por la venta de la fábrica de Woodland. La firma considera que, tras decidir acometer desinversiones de los negocios de pasta seca de Francia y Norteamérica, podrá cerrar el ejercicio con un resultado operativo (ebitda) ajustado de entre 372 y 378 millones de euros, muy por encima del obtenido en 2019 cuando aún tenían dichos negocios dentro del grupo.
Ebro Foods ha argumentado que el importe neto de la cifra de negocio se ha elevado un 5,7%, hasta los 2.306,8 millones de euros, impulsado fundamentalmente por la positiva evolución de la división arrocera. En concreto, lo que más se ha disparado ha sido el negocio del arroz, las ventas del cual se situaron en los 1.828,9 millones de euros, un 6,7% más, mientras que el resultado operativo alcanzó los 232,3 millones de euros, un 8,9% más.
Respecto a la pasta, la facturación se mantiene estable hasta los 482,4 millones de euros, mientras que el ebitda se situó en los 62,4 millones de euros, un 24,6%. La compañía ha destacado la evolución de las ventas de la pasta fresca, el buen comportamiento de Bertagni, que amplía referencias y gana puntos en la distribución, y el crecimiento de Garofalo en Estados Unidos y Canadá.
Por su parte, el resultado bruto de explotación (ebitda) ajustado ha alcanzado uno de los mejores de su historia, hasta situarse en los 140,1 millones de euros, lo que supone un 16,1% más, por encima de los obtenidos antes de la venta de las divisiones de pasta seca en Norteamérica y Francia.
De esta forma, la deuda neta del grupo se sitúa en los 588,2 millones de euros, lo que supone 174,4 millones de euros menos que a cierre de ejercicio 2022. Esta cifra recoge los pagos efectuados del dividendo anual, así como los 102,5 millones de euros de inversiones en activos fijos.