El ministro de Economía insiste en que el gobierno español sigue "preocupado" por la opa del BBVA-Sabadell. En dos entrevistas concedidas este jueves a RAC1 y TV3, Carlos Cuerpo explicaba que la preocupación es la misma que tienen desde el 9 de mayo del año pasado, día en el que el BBVA lanzó la opa por el Sabadell, pues no han vuelto tener "nueva información" desde entonces, ya que es la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) quien se está encargando de analizar el impacto en la competencia de la operación.
Una vez que la CNMC se pronuncie, recordaba, será Economía quien intervenga. Pues como ya ha explicado en anteriores ocasiones, es el gobierno español quien tiene la última palabra para decidir si la operación de concentración se aprueba o no. Y aquí, el ministro económico hacía una advertencia, y es que, aunque hay "muchos elementos que configuran la preocupación del gobierno por la operación" hay uno en el que llevan "tres años trabajando" y no permitirán que se dé "un paso atrás".
Se trata de la inclusión financiera y más concretamente de los cierres de oficinas en las zonas más despobladas, en la España rural. "Esto para nosotros es importantísimo. Llevamos tres años trabajando en una agenda de inclusión financiera que incluya la posibilidad de tener acceso a los servicios financieros por parte de todos los ciudadanos y (la opa) podría ser un paso atrás en ese sentido".
Esta agenda de inclusión financiera, recordaba, la han trabajado con las entidades en los últimos años "para intentar que haya un acceso al 100% de los servicios financieros en todo el territorio, no solo en el mundo rural. Y no queremos dar pasos atrás", insistía en ambas entrevistas. Carlos Cuerpo comentaba también que el problema de esta operación es "el impacto que pueda tener en la competencia" por el exceso de concentración que ya hay en el mercado.
Y si se unen dos bancos más, ese impacto se puede agravar y ser "negativo para los consumidores y las condiciones de sus productos, en particular para las pymes". Aquí recordaba que el Sabadell es un banco muy concentrado en pymes y muy importante para el tejido empresarial de Catalunya y el País Valenciá, por eso es donde más preocupa esta concentración, aunque en general, al gobierno de Pedro Sánchez le preocupa "el impacto en cuanto a cierre de oficinas y empleo".
Es aquí donde hacía alusión a un término financiero utilizado en las operaciones de concentración y al que el BBVA también se ha referido: las sinergias. "Las sinergias se traducen muchas veces en reducción de costes, con oficinas y servicios centrales" comentaba "y también en posibles cierres de oficinas a nivel regional y local". Algo que el gobierno español ha dejado claro que no permitirá.