Las patronales advierten que el apagón eléctrico de este lunes comportará elevadas pérdidas económicas si bien, de momento, evitan entrar en posibles reclamaciones de indemnizaciones. Esperan que pronto se aclaren los motivos que han provocado una caída general del sistema. A los gobiernos, les exigen información clara y, a los empresarios, les recomiendan que se informen a través de fuentes fiables –medios solventes– para evitar las fake news.

En este sentido, Pimec recomienda a las empresas que "sigan los protocolos dictados por las autoridades y se informen a través de fuentes fiables". Aconseja a los empresarios que solo hagan caso de "noticias fiables recibidas a partir de fuentes solventes, como los medios de comunicación de acreditada solvencia y las fuentes oficiales".

En el mismo sentido, Cecot también recomienda a los empresarios que sigan los canales de comunicación oficiales de los gobiernos y de Red Eléctrica para conocer las previsiones sobre el restablecimiento progresivo del suministro eléctrico. Esta patronal vallesana está convencida de que las causas del apagón se conocerán muy pronto, motivo por el que consideran que ahora hace falta "priorizar el restablecimiento total del servicio eléctrico y activar planes de actuación rápida y de comunicación frecuente y fluida hacia la ciudadanía".

En un comunicado, Cecot califica de "insuficientes" las comunicaciones gubernamentales –tanto las del ejecutivo de Pedro Sánchez como las de la Generalitat– y de Red Eléctrica. Critican la "dilatación en el tiempo" al comunicar las informaciones, así como "la información sin valor" que trasladan en algunos casos. Exigen, como ha pasado en otras crisis, que "la comunicación sea más fluida, con indicaciones claras, orientaciones concretas y plazos realistas para que la ciudadanía pueda tomar las decisiones oportunas".

Subrayan que el apagón eléctrico, por su carácter general, comporta pérdidas económicas. De momento, ninguna organización empresarial ha realizado una valoración aproximativa. En el sector industrial, muchas empresas han parado las líneas de producción y han enviado las plantillas a casa. Los trabajadores se han encontrado con dificultades para acceder al puesto de trabajo y también para abandonarlo porque los transportes públicos tampoco funcionaban con normalidad.

El apagón ha impactado de manera desigual en las empresas, en función de los sectores de actividad, de su dimensión y de si disponen de equipos de autogeneración eléctrica. Por ejemplo, Las grandes empresas del sector de la automoción han parado, mientras que las farmacéuticas, que no son grandes consumidoras energéticas, han mantenido la mayor parte de la actividad.

En el sector de la automoción, las plantas de Seat, en Martorell, y Ebro, a la Zona Franca de Barcelona, pararon la producción después del apagón. Las estaciones de servicio de Moeve (la antigua Cepsa) también cerraron, motivo por el que dejaron de suministrar combustible a los automovilistas que estaban en la carretera.

En cambio, la afectación en la industria farmacéutica ha sido más leve. Fuentes de Boehringer Ingelheim y de Grifols informaron a Efe que mantuvieron su actividad. Desde este último grupo se indicó que disponen de autogeneradores eléctricos si bien también aplicaron planes de contingencia.

A las empresas que dispongan de grupos electrógenos, Pimec les da un consejo práctico: que "los preserven para servicios esenciales", como comunicaciones y seguridad.

El Ministerio de Trabajo ha recordado que las personas que no puedan desplazarse a su centro de trabajo o que no puedan ejercer su función por culpa del apagón se pueden acoger a permisos retribuidos.