Endesa obtuvo un beneficio neto de 2.541 millones de euros en 2022, frente a los 1.435 millones registrados en el ejercicio anterior, según ha informado la compañía este viernes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). La cifra supone haber incrementado sus ganancias en un 77,1% con respecto a 2021, año en el que se vieron impactadas por un deterioro significativo superior a los 600 millones de euros en el negocio extrapeninsular de la compañía.
Además de este factor, la compañía explica el crecimiento por el buen comportamiento del negocio del gas en su conjunto. Endesa logró un resultado ordinario neto de 2.398 millones, un 26% más respecto a 2021, gracias principalmente al buen comportamiento del negocio del gas y al elevado funcionamiento de las centrales de ciclo combinado. Esta cifra permitirá a la empresa proponer la distribución de un dividendo bruto de 1,585 euros por título, un 6% superior a lo previsto. La empresa energética obtuvo unos ingresos que alcanzaron los 32.896 millones de euros, frente a los 20.899 millones de 2021, un 57% más.
El resultado bruto de explotación o ebitda se situó en los 5.327 millones en términos comparables, experimentando un crecimiento anual del 25%. Una cifra alcanzada pese al peor comportamiento del negocio comercial, a la reducción del margen de las energías renovables y al impacto negativo de medidas regulatorias en el negocio de distribución. En el lado de la inversión, la eléctrica ha alcanzado su pico histórico, hasta los 2.343 millones, un 8% más que el año anterior. El 76% de esta inversión está alineada con la taxonomía de la Unión Europea. Una cifra que prevé batir de nuevo este año, Endesa, invirtiendo el 20% más.
“Hemos superado con éxito uno de los ejercicios más retadores de los últimos años, tanto por el contexto de mercado como por las intervenciones regulatorias. Retenemos y atraemos nuevos clientes gracias a los productos y servicios que permiten aislarles de los picos de precios vividos", ha señalado José Bogas, consejero delegado de la compañía.
"Esto muestra nuestro firme compromiso con la transición energética en la Península Ibérica que impulsará la independencia energética y menores precios eléctricos. Todo ello nos permite ofrecer una mejora sustancial de nuestra remuneración al accionista, un 10% más que la de 2021, que llevará la rentabilidad por dividendo al entorno del 9%”, ha añadido el directivo.
Crecimiento de la cartera de clientes eléctricos
La compañía destaca haber consolidado el crecimiento en su cartera de clientes libres, tanto domésticos como empresariales, en un contexto marcado por la crisis energética y la volatilidad de los mercados. En concreto, ha sumado 900.000 clientes en el mercado liberalizado, un 15% más, hasta los 6,8 millones. De esta cifra, 400.000 han sido empresas, 100.000 más que un año antes. Esto ha supuesto un alza del 4% en el volumen de electricidad destinada a esta cartera libre, hasta los 78 teravatios hora (TWh) en el año. Por su parte, los clientes acogidos a la tarifa regulada suman 3,7 millones. En total, Endesa ha cerrado 2022 con 10,5 millones de clientes eléctricos en España y Portugal, un 2% más.
En cuanto al negocio del gas, este ha disminuido un 3% los volúmenes utilizados, hasta 99 TWh, con una reducción del consumo de clientes, fundamentalmente empresariales (desde 77 a 64 TWh). Sin embargo, el descenso se ha visto casi compensado por la mayor demanda para las centrales térmicas (de 25 a 36 TWh). La mayor producción con gas y las oportunidades en el mercado mayorista, apunta la energética, explican el crecimiento del margen del negocio hasta 6 euros/megavatio hora (MWh), desde el nivel "anormalmente" bajo de 2021, 1 euro/MWh. La cartera de clientes ha cerrado en 1,8 millones, de los que 1,5 millones están en el mercado libre.
Respecto a la distribución, la energía distribuida ha crecido un 1%, a 132 TWh, de la que 109 TWh ha sido consumida por los clientes propios. Asimismo, el volumen de pérdidas de electricidad y de tiempo de interrupción de suministro han seguido registrando mejoras respecto al ejercicio anterior. En este sentido, la compañía ha señalado que hay que asegurar un marco regulatorio estable que permita destinar el alto volumen de capital necesario para alcanzar los objetivos de cero emisiones netas.
En lo que respecta a otras actividades, Endesa sigue liderando la movilidad eléctrica en España. La compañía cuenta con una red de 13.900 puntos de recarga, un 47% más respecto de los 9.500 a final de 2021. Destaca también el crecimiento del 18% de los contratos e-home, hasta 2,6 millones. Sobre la estrategia de venta de producción propia (nuclear, hidroeléctrica y renovable) con hasta dos años de antelación, tiene ya colocada el 98 % de la esperada para 2023, y el 85 % de la correspondiente a 2024, siempre a un precio de 65 euros/MWh, cumpliendo con la regulación del Gobierno.
Durante el año, Endesa ha añadido 908 megavatios de nueva capacidad renovable, alcanzando los 9.300 megavatios. Incluyendo la nuclear, Endesa alcanza ya un 71% de su capacidad instalada peninsular libre de emisiones de CO2. El 73% de la producción peninsular en 2022 estuvo igualmente libre de emisiones. De los 4.400 MW de nueva potencia renovable que se prevé incorporar como parte del plan estratégico 2023-2025, la empresa ya tiene 1.400 MW en ejecución.
Endesa recurre el impuesto a las energéticas
Endesa ha destacado que el ejercicio ha estado marcado también por numerosas medidas regulatorias tanto a nivel europeo como español. En este sentido, la compañía ha anunciado la interposición de un recurso ante la Audiencia Nacional a la tasa del 1,2% sobre los ingresos de determinadas empresas energéticas aprobada por el Gobierno español. La compañía considera el nuevo impuesto temporal a los beneficios extraordinarios de estas empresas "injustificado y discriminatorio". Esta medida se suma al recurso presentado por la patronal eléctrica española Aelec hace una semana y al anunciado por Iberdrola recientemente.
La compañía ha destacado que los resultados logrados permiten registrar en concepto de impuesto de sociedades 900 millones sobre el beneficio de 2022, lo que supone una tasa efectiva del 25,6%. La contribución fiscal de Endesa en el año ha ascendido a 3.843 millones de euros. España representa el 85% de esa cifra y la empresa "se mantiene entre los cinco mayores contribuyentes fiscales del país".
En cuanto a la evolución de la deuda neta de la compañía, el pasivo de la compañía alcanza los 10.900 millones de euros, lo que supone un incremento de 2.100 millones respecto al cierre de 2021. La energética achaca esta situación al volumen de las inversiones y el pago de dividendos sobre 2021 (por 1.532 millones), que han sido compensados parcialmente por el flujo libre de caja de 1.672 millones logrado en el año.
En este aspecto, la cifra de flujo libre de caja se ha visto especialmente afectada por las partidas regulatorias pendientes de pago por parte de la Administración, que han pasado de 800 millones a final de 2021 a 2.300 millones a cierre del pasado año. Asimismo, la ratio de apalancamiento (deuda neta respecto al Ebitda en términos comparables) se sitúa en dos veces, desde las 2,1 veces de final de 2021.
Por otro lado, el consejo de administración de Endesa ha propuesto la renovación de los cuatro consejeros cuyo mandato vence este año (Juan Sánchez-Calero, Ignacio Garralda, Francisco de Lacerda y Alberto de Paoli), algo que deberá ser aprobado por la junta ordinaria de accionistas que se celebrará en fecha aún por anunciar.