Ante el ERE anunciado por Freixenet a causa de la sequía de los últimos años, CCOO, el sindicato mayoritario en este grupo, propone "flexibilizar el marco normativo para la elaboración de cava" para poder utilizar uva de otras zonas productoras. Sin embargo, la decisión depende del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Cava, que hasta ahora se ha opuesto a todas las peticiones de ampliación.
El grupo Henkell Freixenet anunció este jueves un expediente para despedir a 180 trabajadores, que suponen el 24% de la actual plantilla. Afecta a las empresas Freixenet y Segura Viudas pero sus equipos comerciales quedarán al margen. La compañía justifica esta medida en el impacto que ha provocado la sequía en las tres últimas vendimias.
CCOO –sindicato mayoritario en el comité de empresa de Freixenet, con una representación del 87,5%– ha calificado de "injusta e inaceptable" esta medida laboral. Exige que se retire y que la dirección abra un periodo de negociación. La plantilla participará en la manifestación del 1 de mayo en Barcelona, con una pancarta y espacio propio.
En declaraciones a ON ECONOMIA, Antonio Domínguez, responsable del sector del cava de CCOO y presidente del comité de empresa de Freixenet, apunta que el marco regulador está demasiado "encorsetado" y que, de manera "excepcional" a causa de la sequía, se tendría que permitir una ampliación, para poder utilizar vendimias de zonas externas a la actual Denominación de Origen. Indica que eso tendría que quedar claro en las etiquetas de las botellas.
Este sindicato también reclama que los representantes de los trabajadores tengan presencia en el Consejo Regulador del Cava y en las mesas sectoriales.
Freixenet anunció este ERE en una reunión con el comité de empresa y, a continuación, envió un correo electrónico a toda la plantilla. A primera hora de la tarde del jueves, la dirección expuso sus criterios en un encuentro presencial en la sede central de Sant Sadurní d'Anoia (Barcelona) que también pudieron seguir por streaming. En un primer momento, los trabajadores pensaron que la dirección justificaría el ERE por las políticas arancelarias de Donald Trump, que afectan las exportaciones de vinos y espumosos europeos a Estados Unidos, pero el motivo fue otro: el impacto de la sequía de los últimos años en la reducción de la producción y el encarecimiento de los costes.
En un comunicado, Freixenet indicó que "los patrones climáticos extremos y las consecuencias a largo plazo de la continua sequía de varios años en Catalunya han creado graves interrupciones a la industria, empujando el sector del cava a una crisis sin precedentes". Calculan la reducción de la producción en un 45% por las condiciones climatológicas. Si bien la Generalitat declaró la finalización de la sequía a principios de este mes, la dirección de Freixenet considera que, aunque llueva, "no habrá una recuperación instantánea" porque ahora están comercializando la producción de las vendimias de los años anteriores, según indicaron fuentes presentes en la reunión con la plantilla en Sant Sadurní.
Freixenet ya aplicó el año pasado un expediente regulación temporal (ERTE) que afectó cerca de 500 trabajadores, con reducciones de jornada que fueron del 20% al 50%. En principio, la dirección también lo intentó justificar por la sequía, pero después de que la Generalitat lo desestimara como a causa de fuerza mayor, la compañía lo amparó en otros supuestos económicos y organizativos.
Si bien la duración autorizada de aquel ERTE era de mayo a diciembre de 2024, Antonio Domínguez recuerda que solo duró "un mes y cuatro días", desde el 13 de mayo al 17 de junio. Por eso, considera que ahora la dirección tendría que hacer marcha atrás para analizar otras medidas que eviten los despidos.
El grupo alemán Geschwister Oetker controla más del 50% del grupo Henkell Freixenet, mientras que el resto sigue siendo propiedad de dos ramas de la familia fundadora. En el ejercicio de 2023, el último del que se pueden consultar las cuentas, este grupo facturó 1.230 millones de euros, un 4,1% más respecto al ejercicio anterior. Destacó un crecimiento del 6% en el caso de espumosos —segmento donde la compañía es líder internacional— y un incremento del 11% en bebidas espiritosas. En cambio, los vinos cayeron un 8%.