Meliá ha recibido 40 millones de euros de ayudas públicas en Alemania por las pérdidas obtenidas con su negocio hotelero durante la pandemia. Y este año recibirá otros 2 millones más, según desvelaba el presidente y consejero delegado, Gabriel Escarrer, durante la presentación de resultados del primer semestre, un periodo en el que la compañía ha ganado 46 millones de euros, 12 veces más que el año pasado. En España, sin embargo, las ayudas a fondo perdido han sido muy limitadas, de hecho, son un 95% menor.

Además de los ERTE, recordaba Escarrer, "que no ha sido algo exclusivo de España, también hubo en Alemania y la totalidad de Europa", Meliá ha recibido aquí 200.000 euros por parte del gobierno español (son también ayudas a fondo perdido para empresas afectadas por las pérdidas del covid) y luego una ayuda adicional de 300.000 euros por parte del gobierno balear, "algo muy poco significativo", comentaba. 

En Alemania, sin embargo, las ayudas a las empresas turísticas han sido más cuantiosas, en total serán de 42 millones y servirán "para sufragar el 75% de perdidas" que la compañía ha obtenido allí. Meliá está teniendo un arranque de año "complejo" en el país germano, según explica en su informe financiero. Si bien el comparativo en términos semestrales con el 2022 es positivo por el efecto de Ómicron, existe una doble velocidad según los destinos. Aquellos más dependientes del sector Corporate (empresas) situados al norte del país "sufrieron una menor demanda, que no era compensada con clientes leisure (ocio)".

Adicionalmente, los eventos MICE (de negocios) no recuperan en número de expositores y visitantes en este tipo de ciudades. Mientras que las ciudades con mayores atractivos turísticos, como Berlín y Hamburgo, tuvieron un mejor desempeño, añade Meliá. "Seguimos viendo una evolución desigual en general". En este sentido, Gabriel Escarrer explicaba que el mercado germano "ha sido siempre muy conservador" y allí han sufrido, además, un impacto más fuerte de la crisis energética.

 "Lo hemos visto en hoteles de Canarias donde el principal mercado es alemán e incluso en Alemania". Sin embargo, comentaba el ejecutivo, este mercado empieza a recuperar y ahora tiene un fuerte flujo hacia los hoteles de la cuenca mediterránea, que ya están a niveles precovid. 

Escarrer, que además de ser presidente y CEO de Meliá, es presidente de Exceltur, la patronal turística, se mostró muy tajante durante la crisis sanitaria, pidiendo al Gobierno ayudas directas a fondo perdido para evitar cierres de hoteles y otras empresas del sector. Por eso ahora, ha querido dejar claro qué país le ha apoyado más durante estos años.

En este contexto ha sido preguntado por las elecciones y el incierto resultado electoral. "Pedimos estabilidad, es lo que necesitamos todos y no estaría mal que los dos partidos hiciesen un acto de contrición y abordaran la gobernabilidad de una forma conjunta". Quitando eso, respecto a la estabilidad del sector turístico, cree que hay fondos de los Next Gen "que deberían primar", sobre todo, los que van destinados a los destinos turísticos maduros. "Son estratégicos y transformadores, dan estabilidad".

Asimismo, el ejecutivo también se ha pronunciado sobre el nuevo govern en Baleares. "Se hizo una ley turística que tiene cosas muy positivas, pero también otras que se deben mejorar. Lo bueno se debe preservar, como la apuesta por turismo de calidad y los criterios ESG". Sin embargo, Escarrer entiende que se debe luchar aún más contra la oferta ilegal de los apartamentos turísticos.

"Todos tenemos que estar bajo las mismas reglas del juego y el gobierno autonómico, que es quien tiene la competencia en estas materias, debe ser muy estricto. Porque hablamos de un modelo de calidad, que no de lujo, que va en contra de la sensación de masificación y turismofobia que se ha generado en muchos casos", concluía.