El grupo farmacéutico Esteve prevé crecimientos destacados en sus dos áreas de negocio para 2024: la fabricación de fármacos propios y la producción por contrato (CMO) para terceras compañías. En esta estrategia contribuirá de manera significativa la incorporación de la empresa HRA Pharma Rare Diseases especializada en enfermedades raras y graves -cuya compra ha anunciado recientemente-, y la inversión que realizará este año en la planta de Celrà (Girona), para incrementar hasta un 15% la capacidad de producción para terceros. Este último proyecto denominado Lotus, cuyos detalles se están ultimando, consiste en la construcción de una nueva planta de principios activos en Celrà, al lado de la que ya tienen, para aumentar la capacidad de responder a la demanda de estos productos por parte del mercado.

Con estos proyectos, el grupo de la familia Esteve confía en mantener la senda de crecimiento que ha registrado desde 2020, pasando de 476 millones de euros en ventas los 710 millones ingresados en el 2023. Solo en el último año ha elevado los ingresos un 10%, sumando así tres ecercicis consecutivos con crecimientos de dos dígitos. Por su parte, el resultado operativo (ebitda) ha dado un salto "importante" multiplicándose por dos, desde los 61 millones de 2020 a los 128 millones de 2023, esta última cifra ha supuesto un incremento del 1% con respecto a 2022. En el pasado ejercicio, grupo Esteve obtuvo unas ganancias netas de 60,6 millones, con un alza anual del 6%.

El consejero delegado de la empresa, Staffan Schüberg, ha manifestado que el grupo sigue centrado en ampliar su internacionalización, cuando hoy día el 75% de las ventas ya proviene del exterior, y al reafirmarse como una farmacéutica especializada en determinadas áreas, circunstancia que aporta valor diferencial, márgenes y rentabilidad para seguir invirtiendo en adquisiciones y en innovación, según ha explicado este jueves, durante la presentación de los resultados anuales.

En este sentido, Staffan Schüberg ha concretado que HRA Pharma contribuirá con una mejora del 22% en las ventas de la división de enfermedades raras y graves, en la cual el grupo ya opera con varios fármacos, y que además "supone la entrada en el mercado de los Estados Unidos". No obstante, para Esteve, "Europa sigue siendo el foco principal de actividad", aunque valora estar en América y Asia "creciendo progresivamente, no de forma agresiva", ha concretado el directivo.

Con respecto a la fabricación con contrato (CMO), el negocio ha crecido a dos dígitos en el 2023 y se consolida la capacidad de producción que el grupo adquirió en el 2022 con la compra de la planta industrial de productos de química fina farmacéutica, gestionada hasta la fecha por Uquifa en Lliçà de Vall (Barcelona). Del total de los 710 millones de ingresos de 2023, poco más del 60% se obtuvo a través del negocio de fabricación para terceros, según ha explicado la directora financiera del grupo, Roser Gomila.

La directiva ha concretado que, por regiones, España aportó el 25% del total de los ingresos de Esteve, lo cual supone un 2% más, mientras que el resto de la Unión Europea representó el 49%, con un aumento del 18%. El 26% restante vino del resto del mundo, un 9% más.

Capacidad financiera para hacer compras

Gomila ha asegurado que el ebitda podría haber sido superior si la compañía no hubiera optado por reforzar la inversión que, en el 2023, se elevó a 51 millones de euros, de los cuales unos 15 millones se han destinado a la adquisición de productos y unos 28 millones a innovación en tecnología y nuevas capacidades industriales.

Gomila también se ha mostrado satisfecha por el nivel de liquidez, de 387 millones de euros, y de tesorería, de 292 millones, y por el bajo nivel de la deuda, de 112 millones de euros, a finales de 2023. "Esta posición financiera nos da garantías para poder afrontar el crecimiento inorgánico del grupo", han destacado a los dos responsables del grupo, "a la vez que hay capacidad de endeudamiento".

Lubea, un socio estable, con el 26%

El consejero delegado de la empresa, Staffan Schüberg, ha hecho un balance muy positivo de la gestión conjunta del grupo entre la familia Esteve y el socio inversor Lubea, que hace entrar en el capital de la compañía hace tan solo un año, con la adquisición de un 26%. "Es un socio minoritario que se siente cómodo con esta participación, por lo cual no se prevé que asuma más control", ha dicho Schüberg y ha destacado que "con su experiencia y conocimientos ha aportado mucho a la compañía y a su gestión como si se tratara de una compañía cotizada".

En este sentido, el consejero delegado ha reiterado que la salida a Bolsa de Esteve sigue siendo una opción en la hoja de ruta de la compañía, pero que ahora mismo no está sobre la mesa del consejo de administración, porque tanto Lubea como la familia Esteve tienen una visión inversora a largo plazo.