El Circuito Barcelona-Catalunya, más conocido por circuito de Montmeló, negociará con Fira de Barcelona para aprovechar sus instalaciones, incluida la pista de competiciones de motor, para congresos y acontecimientos feriales. El Consejo Ejecutivo de la Generalitat ha autorizado este martes que se negocie la utilización de este recinto para actividades que no tienen nada a ver con la Fórmula 1, los grandes premios de Moto GP u otras pruebas de velocidad, si bien confía en que se seguirán disputando en Montmeló.
Esta autorización para ampliar los usos del Circuito Barcelona-Catalunya llega en un momento en que está en duda la continuidad de la Fórmula 1 más allá de 2026 después de que, en enero pasado, se confirmara que Madrid acogerá desde aquel año el GP de España.
En el acuerdo del Govern de la Generalitat, titular del circuito, se autoriza a "negociar y concretar" las condiciones de un contrato de arrendamiento de negocio para que Fira de Barcelona pueda explotar las instalaciones de Montmeló. Con ello se pretende sacar más rendimiento económico a esta infraestructura.
En un comunicado, el Gobierno precisa que esta decisión se enmarca en el Plan estratégico de este circuito, aprobado en octubre del 2022, que establece la voluntad de mejorar la eficiencia en la gestión, reforzar la apuesta por la digitalización, convertirse en una referencia en materia de sostenibilidad, intensificar el arraigo territorial y diversificar la actividad.
Aprovechar las instalaciones
El objetivo del Gobierno es "optimizar la explotación de las instalaciones" para que deje de ser un equipamiento exclusivamente concebido en torno a las grandes competiciones de motor, a través de "nuevos modelos de negocio relacionados con las ferias y los congresos, el ocio saludable, los grandes acontecimientos musicales y culturales, y la industria de la movilidad sostenible". En este sentido, señalan que Fira de Barcelona puede contribuir a conseguirlo precisamente por ser un "motor económico y social" y "una de las mejores plataformas para los negocios".
Desde el Gobierno se precisa que este eventual contrato de arrendamiento no afectará a los activos ni tampoco la titularidad de los contratos de Fórmula 1 y MotoGP, que seguirán siendo propiedad de Circuits de Catalunya. Por otra parte, confían en que el aprovechamiento del circuito para otros usos contribuya a "equilibrar el balance de la empresa y capitalizar las aportaciones realizadas" por la Generalitat y la empresa pública Avançsa durante los últimos años. De esta manera se incrementará la participación social de la Generalitat hasta el 85% de Circuits de Catalunya, la empresa gestora.
En los últimos tres años, la Generalitat ha invertido 25 millones de euros para que la Fórmula 1 se quede en Montmeló más allá del 2026. Calculan que esta competición genera un impacto económico en el territorio de 112 millones de euros.