La junta de accionistas de ACS ha dado este viernes luz verde a la reelección para los próximos cuatro años de Florentino Pérez como consejero ejecutivo de la compañía, que preside desde 1993 y en la que es su principal accionista con más del 13,5 % del capital, informa la agencia EFE. Durante la junta, a la pregunta de un accionista sobre imitar a Ferrovial y cambiar de sede, Pérez ha sido muy claro: "No se nos ha pasado por la imaginación". "No es que lo critiquemos, pero ni lo hemos comentado", ha matizado.
Además, la junta ha validado el nombramiento de dos nuevas consejeras independientes, las abogadas del Estado Lourdes Máiz y Lourdes Fraguas, después de que el Gobierno aprobase a comienzos de abril un anteproyecto de ley de paridad que establece que las mujeres deberán representar al menos el 40 % de los consejos de administración de las cotizadas antes de julio de 2024.
La junta, celebrada hoy, ha aprobado todos los puntos del orden del día, entre los que figuraban reelecciones de consejeros, los informes de remuneraciones, el nombramiento de Deloitte como auditor para tres años; un plan de entrega de acciones para los directivos, y un dividendo de dos euros por acción.
Foco puesto en Abertis
Desde enero de 2022, el grupo ACS ha invertido en distintas operaciones corporativas casi el 70 % -más de 3.300 millones- de los fondos recibidos por la venta del área de servicios industriales en 2021 al grupo francés Vinci, con los que ingresó cerca de 5.000 millones.
De hecho, la compañía insiste en seguir invirtiendo estos fondos en concesiones, siendo un objetivo prioritario Abertis, y en la simplificación del grupo, aunque no tiene previsto ahora aumentar su participación en la alemana Hochtief.
La compañía analiza distintas oportunidades en el negocio concesional, fundamentalmente en Estados Unidos, con los nuevos planes que van a salir en estados como Georgia o Florida. A lo que se añade también los planes de inversión que maneja su participada Abertis en Grecia, Puerto Rico o Estados Unidos.
Tras alcanzar recientemente el 100 % de la sociedad concesionaria de la autopista texana SH-288 tras adquirir en abril la participación del último accionista por 400 millones, los planes de ACS pasan por incorporar este activo a Abertis, algo que podría ocurrir antes de que acabe el año.
Una vez que obtenga todas las autorizaciones necesarias y consolide de forma efectiva el activo, la opción más probable pasa por venderla a Abertis una vez que cierre el proceso de "due diligence".
Abertis es una de las prioridades para ACS, que está en algunas negociaciones más concretas para aumentar su peso en el negocio concesional.
No contempla dividendo extraordinario
Aunque el presidente de ACS ha señalado que la compañía mantiene su compromiso con la remuneración al accionista, que este año volverá a ser de 2 euros por acción, y que con los datos actuales se espera poder incrementarla en los próximos años en línea con la evolución de los resultados, no tiene en mente el pago de un dividendo extraordinario.
En respuesta a un accionista, Pérez ha indicado que tras vender la división de servicios industriales a Vinci, la compañía ha entendido prioritario reinvertir estos fondos en el crecimiento del área concesional y en simplificar la estructura del grupo y ha reiterado que invertirá todo lo que pueda para ser más rentable.
Tras un año como consejero delegado de ACS, Juan Santamaría, ha destacado que las expectativas para los próximos años son "prometedoras" y que la estrategia pasa por reducir el perfil de riesgo de la cartera; apoyar la simplificación del grupo; aumentar los esfuerzos en medio ambiente y sostenibilidad y reforzar el crecimiento.
De hecho, ACS ha incrementado el volumen de proyectos en áreas relacionadas con la transición energética, la red 5G, la nueva movilidad sostenible o el sector de la salud y biofarma y se ha marcado como objetivo alcanzar la neutralidad climática en 2045.