El presidente de Foment del Treball, Josep Sánchez Llibre, ha advertido este viernes que la reducción de la jornada laboral que propone el Gobierno supondría un incremento de los costes unitarios salariales del 7% y de los costes globales para las empresas del Estado de 12.000 millones de euros.

Si se añade el coste del absentismo laboral que calculan en 37.000 millones de euros por año, el coste resultante sería "escandaloso" porque se situaría en torno a los 49.000 millones de euros, equivaliendo al 4,1% del PIB español, según precisó el presidente de Foment.

Sánchez Llibre realizó estas declaraciones en la presentación de un manifiesto contra la reducción de la jornada laboral y en defensa de la negociación colectiva que cuenta con el apoyo de 18 organizaciones sectoriales catalanas. Los firmantes consideran una "injerencia unilateral" la propuesta del Ministerio de Trabajo. Mantienen que se ha hecho sin diálogo social y advierten de los costes que provocará en las empresas.

Dirigiéndose a la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, el presidente de Foment ha subrayado, "con el máximo respeto pero también con la máxima contundencia", que "no estamos en contra de una jornada laboral por principio sino de una reducción por ley que uniforme todos los sectores y empresas".

Ha indicado que han aportado estadísticas que demuestran que, a través de la negociación colectiva, "se han producido continúas reducciones de la jornada laboral legal, por la vía de los convenios colectivos en todos los sectores y empresas donde ha sido posible. De forma pactada y equilibrada". Hasta el 31 de octubre de 2023, 101 convenios colectivos en Catalunya, el 29,19% del total, han pactado menos de 1.712 horas anuales, que ya suponen menos de 37,5 horas semanales, según los datos que ha desgranado en la rueda de prensa.

Sánchez Llibre ha subrayado que, de llevarse a cabo la reducción de jornada tal como está planteada, pondrá en riesgo "el futuro de miles de pymes de los sectores más afectados y decenas de miles de puestos de trabajo por la pérdida de productividad que comporta esta ley". La receta que propone el líder patronal es la de "poner en valor uno de los grandes éxitos de la democracia española: el diálogo social y la negociación colectiva".

El manifiesto "Sí a la economía productiva, sí al diálogo social, sí a la democracia" subraya los aspectos "negativos para las empresas" pero también la "injerencia inaceptable" del Gobierno o la "ausencia de diálogo social". Las entidades que lo han firmado son: ACRA, AECOC, Barcelona Oberta, CEDAC, Confecat, Consell de Gremis de Catalunya, FECIC, Fecavem, Fedequim, Federació Catalana de Càmpings, Gremi d'Arts Gràfiques de Catalunya, Gremi de Restauració, Institut Agrícola San Isidre, TexFor, Transcalit – Federació Catalana de Transports de Barcelona, UFEC, Unió Patronal Metal·lúrgica y Unió Catalana d'Hospitales.