Freshly Cosmetics, el fabricante de cosmética natural de Reus (Tarragona), ha diseñado un plan estratégico para los próximos cinco años, para "recuperar su enfoque inicial en la innovación de producto", y poder adaptarse a las transformaciones del mercado del sector donde el comercio electrónico ha visto un decrecimiento durante los últimos años mientras que la venta en físico se ha incrementado". Eso ha implicado la aplicación de un expediente de regulación de empleo (ERE) para una cincuentena de trabajadores en la sede central del grupo, que la empresa argumenta por motivos económicos y organizativos. Ahora, la plantilla total de Freshly queda en unas 240 personas.
Con la nueva estrategia, la compañía fundada por Mireia Trepat y Miquel Antolín, "aspira a consolidarse como una marca omnicanal, incrementando su disponibilidad física en España, Italia y Portugal a través de canales B2B". El nuevo plan también incluye, afefgeixen, una estrategia de marketing centrada en la construcción de marca y "una fuerte apuesta por la innovación en producto", con el objetivo de ofrecer una propuesta de valor única en el sector.
La compañía ha tomado esta determinación después de cerrar un expediente de regulación de empleo (ERE) que ha afectado a 52 trabajadores, sobre el 18% de la plantilla de la compañía, y que supone reducir un 35% el número de trabajadores del centro de trabajo de Freshly Park en Reus (Tarragona). Desde el pasado 7 de noviembre, representantes de la dirección y de la plantilla han negociado el expediente que se ha resuelto con una indemnización de 33 días por año trabajado o proporcional, con un mínimo de 3.000 euros para cada persona afectada por el ERE. La empresa se hace cargo de los costes de asesoramiento legal de los despedidos. Además, los trabajadores implicados dispusieron de un permiso retribuido de 30 días desde el momento en que se les comunicó la decisión, según ha informado a la compañía este lunes.
Motivos 'abstractos', según la plantilla
Los representantes sindicales han admitido que no se trata del acuerdo que habría "deseado" y subrayan que con el pacto se cierra un proceso que ha estado "doloroso y difícil para todo el mundo". La plantilla, que ha realizado varias acciones de protesta en las últimas semanas, ha defendido que los motivos alegados por la dirección son "abstractos e infundados". Los trabajadores basan su razonamiento en el hecho que "Freshly lleva años consecutivos con resultados positivos y tiene una previsión de beneficios de 4,3 millones de euros en el 2025".
Sin embargo, aseguran que Freshly alega un "exceso de plantilla" cuando ha contratado nuevos trabajadores durante el 2024 para el mismo centro de trabajo, "muchos de los cuales no están incluidos al ERE", aunque "estos nuevos empleados ocupan posiciones idénticas a las de las personas afectadas por el ajuste de empleo".
Según la plantilla, "la empresa ha admitido que externalizará funciones y departamentos que hasta hace poco había decidido internalizar, generando una confusión total sobre sus verdaderas intenciones" sobre el futuro de la gestión empresarial.
Mientras que, por su parte, sus fundadores defienden que "la compañía continúa comprometida a ofrecer un proyecto sólido y de largo termine, basado en una cultura organizacional robusta y enfocada en el desarrollo del talento y la excelencia".