El sector hotelero celebra la iniciativa del Gobierno español, que este jueves ha comunicado que modernizará el Imserso. El Ministerio de Derechos Sociales, de quien depende este programa turístico para mayores de 65 años, tenía la opción de prorrogar el programa que se puso en marcha hace tres años o crear nuevos pliegos para la temporada de 2023. Es decir, lanzar un nuevo concurso con otras condiciones más adecuadas para los jubilados de ahora “que están más viajados y requieren otro tipo de actividades que van más allá del sol y playa”, indica Ramon Estalella, secretario general de CEHAT.
En declaraciones a ON ECONOMIA, el de la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT) asegura que la prórroga “hubiera sido un desastre” porque tenía un 0% de incremento de precios anual. “Han pasado tres años desde ese programa y la inflación ha sido casi del 17% en el sector hotelero, por la subida de costes y de la energía”. Estalella cree que el Gobierno español “se han dado cuenta que no pueden obligar a un proveedor a trabajar a pérdidas y tenían que actualizarlo”.
CEHAT, que representa a 16.000 establecimientos, como hoteles, campings o balnearios, espera que los nuevos pliegos, de los que se conocerán los detalles próximamente y sentarán las bases del programa del Imserso que se pondrá en marcha en octubre de este 2023, no puntúen tanto el precio y sí la calidad, por ejemplo, quien ofrece más camas en temporada baja, pues el objetivo, recuerda, es mantener el empleo.
“Hay que mantener el empleo en aquellas zonas de costa que sufren más estacionalidad” y para ello cree que debe subir la oferta y no estar tan centralizada en los destinos de sol y playa, como Benidorm, un lugar que por excelencia se asocia al Imserso en invierno. “Hay zonas del interior que también generan mucho atractivo, como los parques naturales”, asegura.
La idea de la patronal hotelera es hacer un estudio para ver a qué zonas les vendría mejor contar con turistas en temporada baja y que ofertas pueden resultar más atractivas para un viajero de 65 años que no es igual antes porque “ya ha viajado mucho”. Asegura que hay personas a las que les mueve más el turismo interior que la costa, pero si el viajero prefiere costa se le debe ofrecer algo más que sol y playa.
Encontrar trabajadores para los hoteles "es un drama"
Sea como sea, Estalella insiste en que “lo fundamental” es cubrir las temporadas bajas porque en los hoteles el tema del empleo “es un drama”. Y es que cuando los hoteles se preparan para volver a abrir en temporada alta “tienen un serio problema para encontrar personal", porque hay personas que prefieren un empleo 12 meses y han encontrado otro trabajo mientras el hotel ha estado cerrado en temporada baja.
El secretario general de CEHAT pide al Gobierno español “la mayor celeridad posible” para que se publiquen los nuevos pliegos y poder adaptarse, porque suelen llevar mucha carga administrativa después. Además, cree que para elaborarlos deben pedir colaboración a los expertos en turismo como su patronal.
En un comunicado la Conferación pone en valor este programa de turismo social para mayores, que ha sido, "sin duda, el mejor programa de vacaciones puesto en marcha por las administraciones públicas y que no tiene similitud con ningún otro a nivel europeo", ya que cumple el doble objetivo de proporcionar vacaciones organizadas a los mayores a un precio asequible y de ayudar a los municipios turísticos de temporada.
CEHAT apunta que una de las debilidades más significativas del turismo español es su acusada estacionalidad, que provoca el cierre de muchos establecimientos hoteleros y de la oferta complementaria durante varios meses del año. Algo que, "acarrea serios problemas para el empleo y un declive económico en una gran parte de los municipios turísticos". Pero el Imserso puede ayudar a lo largo del año a que esas zonas permanezcan abiertas, dando estabilidad a miles de familias que dependen de la llegada de turistas y ejerciendo un efecto directo sobre el comercio, la restauración y el resto de las actividades relacionadas con el turismo.
Los hoteleros venían solicitando desde hace años la revisión y modernización del programa para poder dar el servicio que requerían los mayores. En este sentido, CEHAT subraya cómo a lo largo de los años se han incrementado el conocimiento de los viajeros y sus exigencias en materia de calidad. Sin embargo, la patronal destaca que el último concurso produjo serios problemas de rentabilidad para los prestadores de servicios, obligando a los empresarios hoteleros que participaban a hacerlo con precios muy bajos que les ocasionaban importantes pérdidas, pero viéndose abocados a participar por su necesidad de mantener empleos fijos y no provocar despidos masivos.