Continúan los movimientos en el accionariado de Grifols. Esta vez ha sido el banco de inversión Goldman Sachs el que ha protagonizado un incremento de su participación en el capital de la farmacéutica catalana desde el 5,8% hasta el 6,4%. Se trata de un movimiento que se produce tras el nuevo ataque del fondo bajista Gotham City Research el pasado martes y la publicación de los resultados trimestrales de la compañía el mismo día.

La participación actual del gigante norteamericano es concretamente del 6,442%, adquirida a través de Goldman Sachs International (Londres), y se reparte entre un 1,554% de derechos de voto y un 4,888% de instrumentos financieros, según recoge la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en sus registros. En total, Goldman Sachs posee más de 27 millones de títulos de la compañía de hemoderivados, que al precio actual del mercado tiene un valor superior a los 273 millones de euros.

Cabe destacar que parte de los instrumentos financieros que posee Goldman Sachs en Grifols están destinados a préstamos a terceros, probablemente a fondos bajistas que buscan lucrarse con la caída en bolsa de la farmacéutica. Así, según se desprende de los documentos aportados en la CNMV, Goldman tiene 13,2 millones de acciones destinadas a terceros inversores que pueden operar en corto contra Grifols.

No obstante, el reciente movimiento refleja una reducción de este tipo de títulos y un aumento de los que son derechos de voto en la compañía. A la operación de la firma estadounidense se suma el del fondo Melqart, que ha reducido su posición hasta el 0,9% en el capital de Grifols, participación atribuida en su totalidad a instrumentos financieros en contratos por diferencias (CFD). En este caso, el paquete de Melqart roza los 4 millones de acciones de la cotizada, con un valor que se aproxima a los 40 millones de euros.

Las cuentas de Grifols y el nuevo ataque de Gotham

Los movimientos accionariales llegan tras la presentación de los resultados trimestrales de la compañía, que revelan un beneficio de 21 millones de euros hasta marzo, frente a las pérdidas de 108 millones del mismo periodo de 2023, afectado por costes extraordinarios de reestructuración. La compañía también creció en ingresos, aunque elevó su deuda, disminuyó aún más su flujo de caja libre y mostró un ratio de apalancamiento elevado, indicadores económicos que siguen preocupando al mercado.

Es por ello que la compañía ha hecho hincapié en mejorar estas cifras en 2024 y ha trazado un plan para elevar los ingresos y el resultado bruto de explotación (ebitda). Una estrategia que, sumada a la venta definitiva del 20% de su filial china Shanghai RASS, irá destinada a aliviar el endeudamiento de la compañía y generar efectivo.

Por su parte, Gotham sigue presionando a Grifols con nuevos informes. El fondo oportunista, como así lo considera el presidente de la farmacéutica, Thomas Glanzmann, publicó un análisis el mismo día de la presentación de resultados. En él, la firma capitaneada por el misterioso Daniel Yu acusa nuevamente de irregularidades en determinados pagos entre la filial de Grifols BPC y Scranton, el vehículo inversor vinculado a la familia fundadora y uno de los máximos accionistas de la empresa catalana.

El fondo estadounidense asegura que BPC prestó "a lo largo de los años" fondos que "recibió de un tercero, muy probablemente Grifols", al 'family office' Scranton. De este modo, considera irregular un pago por parte de BPC a Scranton de 266 millones de euros. "En lugar de pagar este dividendo en efectivo, BPC ha cancelado los préstamos que hizo a Scranton, lo que nos lleva a pensar que el 'family office' nunca tuvo la intención de devolver estos préstamos", ha afirmado Gotham.

En cualquier caso, la cotización de Grifols no ha tenido un impacto significativo tras la nueva ofensiva de Gotham. El miércoles, el mercado reaccionó positivamente a sus resultados y los títulos de la empresa de hemoderivados subieron un 3,3%. En la jornada de este jueves caen en torno a un 2%, a tan solo dos horas del cierre de mercado.