La cadena de panadería y bollería Granier se centrará en la internacionalización en los próximos dos años, con el foco puesto en el crecimiento en el Reino Unido, donde prevé pasar de las 2 tiendas actuales en unas 15, mayoritariamente en propiedad. Su expansión en ciudades como Londres forma parte del eje estratégico para su crecimiento y que tiene por objetivo disponer de hasta 100 establecimientos fuera de España en 2026, es decir doblar la presencia exterior en dos años, ya que actualmente Granier tiene 56 cafeterías en el extranjero -entre propias y franquiciadas-.
Para alcanzar su objetivo, el fundador y máximo directivo de la cadena, Juan Pedro Conde, ha ideado un plan con tres ejes principales: Venezuela, que pasará de las 31 cafeterías actuales a 37; República Dominicana, donde se abrirán seis nuevas, duplicando el número actual, y Reino Unido, donde la firma está impulsando el gran proyecto de desarrollo citado anteriormente. Pero hasta llegar a los 100 establecimientos, necesitará también abrir nuevos puntos de venta en Estados Unidos y Costa Rica, que contarán con tres
establecimientos más en 2026, alcanzando 6 y 10 tiendas, respectivamente. También destacan su presencia en Miami, su primer destino fuera de España, en 2013, con únicamente tres años de recorrido como marca y cadena.
El consejero delegado destaca que habrá un giro en la estrategia para potenciar los establecimientos en propiedad, en una cadena que desde su fundación en 2010 ha fundamentado su crecimiento en las franquicias. En la actualidad, dispone de 270 tiendas en España, de las que únicamente 40 en propiedad, y está ejecutando un plan de remodelación con una inversión global de 5 millones de euros, un proceso que prevé concluir en 2026. Con esta iniciativa, se propone modernizar sus establecimientos introduciendo un nuevo diseño, elementos visuales y colores, sin perder su identidad.
Un negocio de más de 50 millones
Juan Pedro Conde explica que “en la última década hemos trabajado mucho para consolidar la compañía como referente en
nuestro mercado, y han sido años de gran crecimiento, de ampliación de nuestra oferta y de expansión, hasta convertirnos en una cadena que factura en torno a 50 millones de euros con las tiendas propias y tiene una plantilla de 2.000 profesionales". Las previsiones, con las próximas aperturas de tiendas propias, fijan el crecimiento de las ventas en 10 millones anuales. En global, la cadena mueve unos ingresos de 200 millones de euros.
Ahora, para abordar la siguiente etapa de desarrollo, consideran prioritario la expansión internacional y la renovación, "en línea con la evolución de los gustos de nuestros clientes”, con base a, exclusivo método de elaboración del pan, basado en procesos tradicionales
y largas fermentaciones. Para ello, el grupo cuenta con tres obradores: Vilanova i la Geltrú -donde se abrió la primera panadería que dio origen a la marca Granier, en 2010-; Algete (Madrid) y Telde, en Gran Canaria. Además de las pequeñas instalaciones que hay en las tiendas, "porque únicamente abrimos un obrador cuando hay una masa crítica suficiente para que sea rentable; como elaboramos y congelamos, podemos transportar el producto a todas nuestras tiendas en el mundo". Asegura que, por el momento, la expansión puede abordarse con la capacidad productiva actual.
En la central de Vilanova i la Geltrú trabaja un equipo de I+D, de 4 personas, que se encargan de renovar la gama de productos. En la sección de panadería, la marca cuenta con la colaboración del maestro panadero Eduardo Úbeda y la gama de bollería se renueva constantemente, según su fundador.
Sucesión, socios y profesionalización
El artífice de Granier asegura que, aunque parezca simple, no ser trata de un negocio fácil. De ahí que esté pensando ya en cómo ordenar el futuro y el relevo generacional. De tal manera que considera más adecuado "optar por la profesionalización de la compañía" y "por qué no", se pregunta, "dar entrada a un socio financiero". "Mirando a futuro y a la sucesión, creemos que llega el momento de que alguien entre con proyección de futuro; pero no hay fechas, no prisa; lo haremos con tiempo", asegura en declaraciones a ON ECONOMIA.
Mientras, Juan Pedro Conde sigue con proyectos para Granier y otros complementarios, como el impulso que está dando a la cadena Sana Locura Gluten Free Bakery, las panaderías especializadas en productos sin gluten. Granier posee el 68% de la cadena que desarrollo su fundador y actual consejero delegado, Fermín Sanz. La intención es alcanzar los 25 establecimientos abiertos en 2026, ya sean propios o a través de franquicias.
Preguntado sobre algunos tropiezos que ha tenido la marca con sus franquiciados y con la competencia durante su expansión en España, Juan Pedro Conde defiende el modelo de franquicia que "nos ha permitido crecer y ser líderes de mercado en los últimos 15 años". "El negocio ha aguantado perfectamente y ahora hemos llegado al rango más alto de nuestra historia, con franquiciados que tienen hasta más de 20 tiendas".