La compañía de hemoderivados Grifols ha anunciado este martes la colocación privada de una emisión de 1.000 millones de euros de bonos garantizados (senior secured notes), a un tipo de interés del 7,5%, con vencimiento en abril de 2030. Esta operación financiera permitirá amortizar los bonos no garantizados (senior unsecured notes) con vencimiento en 2025. "Los términos y las garantías de estos bonos son significativamente consistentes con la documentación existente en la deuda garantizada de Grifols, incluidas las garantías reales otorgadas y los respectivos garantes", asegura la compañía en un comunicado.
Grifols destaca que esta transacción supone "un importante hito financiero", subrayando "la confianza de los mercados financieros en la solidez del negocio y la resiliencia operativa" de la compañía, por lo que considera que "refuerza el diseño de la estructura financiera a largo plazo".
Pendientes de la venta de Shanghai RASS
En este mismo sentido, en el comunicado, se insiste en que Grifols obtendrá unos ingresos adicionales durante el primer semestre de este año, cuando se ejecute definitivamente la venta de un 20% de su participación en Shanghai RAAS al Grupo Haier, por 1.800 millones de dólares estadounidenses. "Este acuerdo estratégico avanza de acuerdo a lo planificado", recalca el comunicado, y hace referencia a que "los ingresos derivados de esta desinversión se utilizarán para la reducción de deuda garantizada (secured debt) de Grifols con vencimiento en 2025, contribuyendo también a la mejora de su estabilidad financiera.
Respecto a la estrategia financiera acometida con la emisión de los bonos hasta 20230, Grifols manifiesta que es "un importante paso adelante para abordar los vencimientos de 2025", Thomas Glanzmann, presidente ejecutivo de Grifols, ha expresado "la impecable ejecución de este acuerdo", que ha asesorado legalmente las firmas Osborne Clarke y Proskauer Rose LLP y para la que Deutsche
Bank ha actuado como agente colocador de la compañía. Glanzmann ha manifestado que "refleja la fortaleza de nuestro negocio y la confianza que el mercado de deuda tiene en nuestra salud financiera. Esta colocación no solamente mejora nuestra estructura de capital, sino que también refuerza nuestro compromiso continuo con la innovación y el liderazgo en la industria de la salud”.
Los bonos no estarán registrados bajo la Securities Act de 1933 de Estados Unidos y no pueden ser ofertados o vendidos en Estados Unidos a no ser que se produjese el correspondiente registro o una exención equivalente a los requisitos de registro, aclara la nota.