Semana de novedades en Grifols, que está culminando la transformación de su cúpula directiva para desvincular la gestión de la compañía de la familia propietaria. Se trata de una reestructuración organizativa con la que los miembros del clan familiar dejarán de tener funciones ejecutivas en el seno de la farmacéutica, aunque seguirán estando representados en el consejo de administración, el máximo órgano de decisión de la multinacional.
Después de que Raimon Grifols y Víctor Grifols Deu anunciaran el lunes que dejan sus cargos, pasando a ser miembros dominicales del consejo, Albert Grífols Coma-Cros también cesa de sus funciones ejecutivas en el órgano y pasa a ser consejero dominical. Todos ellos, pertenecientes a la tercera y cuarta generación de la familia fundadora, son los últimos miembros en apartarse de los puestos de gobernanza de la empresa catalana.
A los cambios anunciados, se sumará la incorporación de Nacho Abia como nuevo CEO del grupo en sustitución de Thomas Glanzmann y ocupará un puesto en el consejo de administración el próximo 26 de febrero. El directivo llega procedente de la compañía japonesa de tecnología médica Olympus Corporation.
De este modo, el consejo de administración de Grifols se reestructurará para adaptarse a la evolución corporativa que, según el grupo, lleva planeándose desde el año 2022. No obstante, los últimos cambios se han dado de forma posterior a los recientes acontecimientos relacionados con el informe de Gotham City Research y la crisis de reputación y bursátil causada.
Por su parte, Glanzmann seguirá ocupando el cargo de presidente ejecutivo del fabricante de hemoderivados. El empresario suizo lleva 18 años en el consejo de administración de la empresa y, en caso de seguir, tendrá que ser reelegido en la junta de accionistas por otros cuatro años. Si bien lleva casi dos décadas en Grifols, no fue hasta el año pasado cuando ocupó los altos cargos la compañía. Ahora, es otro de los señalados por Gotham al poner en duda su independencia, asegurando que "es un Grifols en todo menos en el nombre".
De consejeros ejecutivos a dominicales
Raimon y Víctor Grifols Deu, que tomaron el relevo de Víctor Grifols Roura (hermano y padre, respectivamente), serán tan solo consejeros dominicales. Raimon es accionista (sin control) de Deria y de Scranton Enterprises, dos de las sociedades vinculadas a la familia que controlan parte de Grifols. La primera, dedicada a la prestación de servicios de consultoría inmobiliaria, comercial, de marketing, cuenta con un 9,2% del capital de la farmacéutica, mientras que el holding holandés ostenta un 8,67%, siendo el segundo máximo accionista.
Precisamente Scranton es el brazo inversor de la familia señalado en el informe y que también investiga la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). No obstante, desde la compañía aseguran que la familia solo controla un 20% de su capital y el resto pertenece a terceros inversores. Por su parte, Víctor Grifols Deu es accionista de Ralledor Holding Spain, otra de las sociedades con las que el clan familiar controla Grifols, en este caso, con un 6,15%.
Ambos han liderado el rumbo del negocio desde 2017, cuando Víctor Grifols Roura dejó el cargo, hasta mayo de 2023, perteneciendo al consejo desde 2016. Ahora dejarán de intervenir en las actividades diarias de la compañía y solo representarán los intereses de las sociedades accionistas. En cuanto a Albert Grífols Coma-Cros, es hijo de Josep Antoni Grífols Gras, quien está al frente de Ponter Trade, tercer máximo accionista de la farmacéutica catalana con algo más de un 7%. Albert ha cesado en sus funciones ejecutivas y también será consejero dominical, completando así la desvinculación familiar.
Tomás Dagá, el abogado de cabecera de Grifols
Más allá de la familia y Glanzmann, también hay otro miembro del consejo que guarda una estrecha relación con la saga Grifols. Se trata del abogado Tomás Dagá, socio y fundador del despacho Osborne Clarke en España. Sin ir más lejos, Raimon fue socio del bufete de abogados de Dagá.
Desde el año 2000 cuenta con un puesto en el consejo de administración de Grifols con carácter externo y ha formado parte de forma activa en la gestión de la compañía. También es accionista de Scranton Enterprises y miembro de los consejos de administración de otras sociedades del grupo Grifols. Además, es consejero de Shanghai RAAS, la compañía china perteneciente a Grifols y que quiere vender parcialmente para aliviar su abultada deuda.
Los seis miembros restantes son consejeros independientes. Carina Szpilka, la consejera coordinadora, es socia del fondo de capital riesgo KFund Venture Capital, consejera independiente de Abanca y de la hotelera Meliá. Es consejera desde 2015, aunque lleva la coordinación desde febrero de 2022. Otro de los integrantes es Íñigo Sánchez-Asiaín, fundador de Portobello Capital, gestora de referencia en la inversión en capital riesgo de España.
Le sigue Montserrat Muñoz, con una dilatada experiencia en el sector de los bienes de consumo en compañías como Procter & Gamble y Danone. Susana González es otra de las últimas en incorporarse como consejera independiente en Grifols. Su carrera profesional está ligada a la transformación digital y actualmente es presidenta para la región EMEA de Rockwell Automation.
Un sillón en la mesa lo ocupa el diplomático James Costos. Fue embajador de EE.UU. en España y ha estado relacionado con el sector audiovisual, donde llegó a ser directivo de HBO. Actualmente, es el presidente de la productora Secuoya Studios. Por último, se encuentra Enriqueta Felip, doctora con una amplia carrera profesional y una eminencia en el campo de la oncología, donde ha aportado grandes contribuciones en la investigación del cáncer.
Como secretaria y vicesecretaria no consejeras, se encuentran Nuria Martín Barnés y Laura de la Cruz Galán, respectivamente. Martín Barnes es socia fundadora del despacho Osborne Clarke y de la Cruz Galán trabaja en el mismo bufete, especialmente en asuntos relacionados con el gobierno corporativo de sociedades cotizadas.