Cambios accionariales dentro de la familia propietaria de La Farga. La rama Guixà ha adquirido las participaciones de la rama Fisas, con la que están emparentados, de manera que la primera pasa a controlar el 80% de este grupo metalúrgico con sede en Les Masies de Voltregà (Barcelona).
La rama Guixà está liderada por el presidente de la compañía, Oriol Guixà Arderiu, y por su hija Inka Guixà Fisas, directora general desde 2017. Precisamente, la familia de Oriol Guixà ha adquirido las participaciones que controlaban sus cuñados Fisas. Se trata de una concentración empresarial en el marco de la empresa familiar. No han informado del importe ni de las condiciones de la operación.
En un comunicado, informan de que este "movimiento estratégico" se ha realizado para "fortalecer la estructura accionarial" y consolidarse como "empresa familiar estable y sostenible". Añaden que este cambio en el accionariado "contribuirá de manera significativa a garantizar una transición suave a las futuras generaciones".
Oriol Guixà asegura que el cambio accionarial asegura la futura viabilidad de la compañía. Y en el mismo comunicado se muestra agradecido a los socios salientes por su "apoyo incondicional". Recientemente, Guixà fue elegido presidente de la fundación empresarial FemCAT.
Más de 1.300 millones de facturación
La Farga (La Farga Yourcoppersolutions) y su joint venture en Fort Wayne (SDI La Farga), en el estado norteamericano de Indiana, cerraron el año pasado con una facturación por encima de los 1.300 millones de euros y un ebitda consolidado de 40 millones de euros.
La Farga está especializada en la fabricación de semielaborados de cobre y sus aleaciones para los mercados eléctricos, envases metálicos, ferroviario, tubos, automoción y conductores especiales. Son líderes mundiales en tecnología de reciclaje del cobre. Han vendido su tecnología a más de una treintena de plantas metalúrgicas de todo el mundo.
Se trata de una empresa de capital familiar con 216 años de historia. Su origen está en una pequeña fundición de metal del barrio de la Barceloneta que Francesc Lacambra Pont puso en marcha en 1808 durante la ocupación napoleónica. Producía objetos de cobre y bronce para usos domésticos. En 1852 construyeron una fragua al lado del río Ter, en un antiguo molino que aprovechaba la fuerza del agua para producir planchas de cobre. Estos elementos se utilizaban para proteger la parte sumergida del casco de los barcos de madera que hacían la ruta a las colonias americanas. A raíz de una crisis, la empresa cambia de propietario en 1981 con la salida de la familia Lacambra y la entrada de la familia Fisas. Precisamente, Vicente Fisas y Oriol Guixà –yerno del anterior– refundaron la compañía y, en 1986, produjo la primera colada continúa de reciclados del cobre en el mundo.