La multinacional norteamericana Cisco destinará el nuevo centro de excelencia que abrirá a Barcelona a una tarea muy concreta: el diseño del circuito integrado de los microchips. Eso implica que el nuevo hub, que se ubicará en el recinto de Ca l'Alier, en el barrio del 22@ norte en Barcelona, no incluirá ninguna de las otras fases del proceso de producción de los microchips, es decir, la obtención de la materia prima –principalmente silicio–, impresión o paquetització. Los semiconductores diseñados en Barcelona se enderezarán en grandes empresas de telecomunicaciones, centros de datos o grandes proveedores de servicios de internet, y no a productos más cotidianos como teléfonos móviles o encaminadores, que usan chips de otras características, según ha confirmado el director general de esta gran corporación en España, Andreu Vilamitjana, en una entrevista en Efe.
Vilamitjana ha señalado que, en concreto, estos semiconductores tienen "un 35% más de capacidad que los procesadores normales", a la vez que "reducen el consumo de energía en un 90%". El directivo también ha concretado que, para la fase de diseño, Cisco no requerirá instalar el renombre 'sala blanca' que se necesita para la producción de esta tecnología, "ya que en Barcelona no se trabajará físicamente con el material, pero sí que instalarán máquinas específicas de alta capacidad", ya que necesita unos potentes aparatos de hardware y software.
En la misma entrevista, Andreu Vilamitjana ha confirmado que la multinacional ha iniciado la contratación de los primeros ingenieros que configurarán la plantilla del centro, aunque no ha concretado qué número de personas si destinarán cuando esté al cien por cien de su capacidad. Tampoco ha facilitado datos sobre la inversión que supone la puesta en marcha de este centro de excelencia, que se suma a los 22 que el grupo tecnológico ya tiene en funcionamiento en otros países como Israel, los Estados Unidos, la India, China y Armenia. En el caso de la Unión Europea, otras ciudades donde tiene centros de este tipo son París (Francia), Berlín (Alemania) y Milán (Italia). Vilamitjana ha manifestado que la búsqueda de profesionales se acota de momento en la Unión Europea (UE) y adelanta que las contrataciones "crecerán rápidamente" con el paso de los meses. Actualmente, en la capital catalana, ya trabaja el 30% de la plantilla de Cisco en España, conformada por profesionales de hasta 27 nacionalidades.
Cisco anunció este nuevo centro en Barcelona el noviembre pasado, después que el presidente y consejero delegado de la compañía, Chuck Robbins, se reuniera con presidente español, Pedro Sánchez, un encuentro que se sumó en otros mantenidas en julio del 2021 en Madrid y el mayo pasado en Davos (Suiza) durante este foro económico. La multinacional se acogerá a las ayudas del Perte sobre microchips y semiconductores que pondrá en marcha España, con una inversión pública de más de 11.000 millones de euros, en el cual Cisco se prevé acoger, si bien Vilamitjana resuelve: "Es una decisión [la creación del hub] sólida que implementaremos con o sin Perte", ha dicho el ejecutivo.
Vilamitjana también destaca como Cisco ha registrado en España sus mejores resultados de la historia el año fiscal del 2022 -de julio a julio-, con un crecimiento a doble dígito, es decir, de más del 10%. La multinacional no comparte datos de plantilla ni financieras por países, solo globales: cuenta con 86.000 empleados (el 48% de los EE.UU.) y en el último ejercicio fiscal ganó 11.800 millones de dólares después de facturar 51.600 millones. Con todo, con el fin de "reequilibrar la organización", Cisco anunció en noviembre el despido de un 5% de la plantilla, en línea con las decisiones tomadas por otras grandes tecnológicas los últimos meses. En el caso de España, Cisco señala un handicap, que ya ha compartido con las administraciones: el déficit de unos 120.000 profesionales tecnológicos (TIC), según las estimaciones de la asociación DigitalES.