La cotización de las acciones de Hugo Boss llegaba a desplomarse hasta un 10,6% en la Bolsa de Fráncfort este martes, después de que la firma textil germana haya rebajado sus expectativas anuales para reflejar los persistentes desafíos macroeconómicos y geopolíticos "que están frenando la demanda de los consumidores globales", con particular intensidad en mercados clave como el Reino Unido y China.

De este modo, teniendo en cuenta el desempeño del segundo trimestre, cuando sus ventas cayeron un 1%, así como de las incertidumbres actuales sobre la evolución de la confianza de los consumidores, Hugo Boss ha rebajado su previsión de crecimiento de las ventas a un rango de entre el 1% y el 4% o entre 4.200 y 4.350 millones de euros, cuando previamente anticipaba un crecimiento del 3% al 6%, en una horquilla de entre 4.300 y 4.450 millones.

Asimismo, la firma textil alemana espera que el Ebit de 2024 se desarrolle en un rango del -15% al 5%, lo que representa alrededor de 350 a 430 millones de euros, cuando anteriormente la expectativa era de que el Ebit creciera entre un 5% y un 15%, hasta alrededor de 430 y 475 millones de euros.

Las nuevas previsiones de Hugo Boss tienen en cuenta que, en el segundo trimestre del año, las ventas disminuyeron un 1%, hasta 1.015 millones, a pesar del crecimiento del 5% en América, mientras que en Europa, Oriente Próximo y África (EMEA) las ventas cayeron un 2% y un 4% en Asia Pacífico.

"Estamos operando en un período de importante incertidumbre macroeconómica global, que también afectó nuestro desempeño en el segundo trimestre", afirmó Daniel Grieder, consejero delegado de Hugo Boss, para quien el momento de cualquier recuperación macroeconómica "sigue siendo incierto".

Esto ocurre tan solo un día después de que Burberry anunciara también que las ganancias anuales serán inferiores al previsto y suspendiera su dividendo, haciendo bajar las acciones de la compañía más de un 11%. "La debilidad que destacamos para el 2024-25 se ha profundizado y, si la tendencia actual persiste durante el segundo trimestre, esperamos registrar una pérdida operativa durante el primer semestre", explica la firma.

En este contexto, Burberry incluso ha despedido a su consejero delegado, Jonathan Akeroyd, después de poco más de dos años en el trabajo. El grupo ha confirmado que Akeroyd se marchará con efecto inmediato "por acuerdo mutuo con la junta". Su sustituto será el exCEO de Michael Kors, Joshua Schulman, que ocupará el cargo a partir de este miércoles, 17 de julio.