Just Eat España presentó el 29 de noviembre una demanda contra la compañía barcelonesa Glovo ante los Juzgados de lo Mercantil de Barcelona, ejercitando una acción de competencia desleal por violación de normas y contratar a falsos autónomos y reclama 295 millones de euros en concepto de daños y perjuicios, según informa la plataforma de delivery. De hecho, justo este lunes Glovo ha comunicado un cambio de modelo laboral y contratará a sus repartidores en España, lo que permitirá a la empresa operar con repartidores laborales en vez de trabajadores autónomos.
Just Eat recuerda en su demanda que numerosas sentencias han condenado a Glovo por contratar a repartidores como falsos autónomos y vulnerar la normativa de Derecho Laboral, por lo que sitúa a Just Eat España en una "clara situación de desventaja competitiva", ya que esta compañía sí contrata a los repartidores por cuenta ajena, incurriendo en elevados costes adicionales, tal y como exige la ley. De esta forma, Just Eat España estima que Glovo ha ahorrado más de 645 millones de euros contratando a falsos autónomos en los últimos años, lo que le ha permitido adquirir una ventaja competitiva significativa. En este sentido, la compañía ha recordado que es pionera en el mercado de plataformas de delivery, donde opera desde 2010, con una plantilla de empleados de más de 2.500 personas y fue la primera plataforma en firmar un convenio colectivo de empresa con los principales sindicatos del país en diciembre de 2021.
Glovo contratará a los repartidores a partir de ahora
Una sentencia que se conoce el mismo día que la firma catalana liderada por Óscar Pierre ha informado de un nuevo modelo en España que le permitirá operar con repartidores laborales en vez de trabajadores autónomos, señalando que su decisión es parte de su "firme compromiso con España y con el impulso de la economía digital en el país". El cambio de modelo incluirá la totalidad de ciudades en las que Glovo está disponible, que actualmente superan las 900, y se aplicará a todas las verticales de la aplicación.
La decisión se ha hecho pública el día antes de que el consejero delegado de la empresa, Óscar Pierre, declare como investigado en fase de instrucción en el proceso penal iniciado por la Fiscalía por un presunto delito contra los derechos de los trabajadores. El proceso penal, que se encuentra en fase de instrucción, surge de una denuncia presentada por el ministerio público, que acusa a la empresa de la presunta comisión de delitos relacionados con los derechos de los trabajadores, incluyendo posibles fraudes en la contratación basándose en actuaciones de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social.
Impacto de 100 millones
Por su parte, la plataforma alemana Delivery Hero, propietaria de Glovo, ha estimado que el cambio de modelo laboral de su filial en España tendrá un impacto de unos 100 millones de euros en su resultado bruto de explotación (ebitda) ajustado para el ejercicio fiscal 2025.
Finalmente, el sindicato CGT ha anunciado este lunes que se ha personado en el procedimiento penal contra Glovo iniciado por la Fiscalía "con el objetivo de poner fin a las prácticas abusivas y fraudulentas que atentan contra la dignidad y los derechos laborales". Está previsto que el CEO de Glovo, Óscar Pierre, declare como investigado en fase de instrucción en el Juzgado de Instrucción 31 de Barcelona este martes 3 de diciembre.