Kike Sarasola deja atrás el fatídico 2022, año en el que acabó solicitando el concurso de acreedores para su hotelera y la empresa acabó en manos del fondo estadounidense Angelo Gordon y la cadena Westmond. El presidente y fundador de la compañía arranca el nuevo curso dotando a la cadena de una nueva cúpula en la que solo él y el consejero delegado, Víctor Fernández Cintrano, mantendrán sus puestos ejecutivos. Y realiza cuatro grandes cambios.
En adelante, Pedro Morán ejercerá el puesto de director financiero (CFO) de la compañía y Stefanie Przybisch será la nueva directora del Departamento de Comunicación, PR e Influencia Digital. Estos nombramientos responden a la necesidad de simplificar el organigrama, dando agilidad a la toma de decisiones y obedeciendo a estructuras estándares a nivel internacional, según ha explicado el propio Sarasola en un comunicado.
"Estamos encantados de poder trabajar con ellos. Estoy seguro de que, con su experiencia, Room Mate seguirá creciendo", ha añadido. Pero estos no han sido los únicos cambios, Room Mate también ha anunciado que la actual directora general, Elena Marrero, asumirá una posición de nueva creación, la de directora de operaciones (COO), que aglutinará las funciones de la dirección de operaciones junto con algunas de sus responsabilidades anteriores.
Por otro lado, con el objetivo de "salvaguardar la esencia y el ADN de la compañía", Room Mate apuesta por Candelaria Corvalán, que cuenta con más de 15 años en la empresa, para la dirección de Recursos Humanos.
Room Mate pasa página
A mediados de 2022, Kike Sarasola y su socia Sandra Ortega (hija del fundador de Inditex, Amancio Ortega) declararon la empresa en quiebra tras dos años de fuertes pérdidas por la pandemia y el rechazo de la SEPI a rescatarla con 52 millones de euros. Fue tras el concurso de acreedores de Room Mate cuando la hotelera quedó en manos del fondo de inversión Angelo Gordon y la cadena hotelera Westmond Hospitality.
Desde entonces, sus nuevos accionistas han puesto en marcha medidas de optimización de costes para mejorar la rentabilidad global del negocio y su crecimiento en el futuro, con un refuerzo de la estructura de capital y la renegociación de los contratos de arrendamiento de sus establecimientos. También están apostando por la expansión internacional de Room Mate.
Pero ahora, más de un año después de la reestructuración, la compañía consigue pasar página y dejar atrás sus peores años y lo hace con esta nueva estructura directiva y con la intención de volver a beneficios este 2023.