La Liga de fútbol española, rebautizada La Liga EA Sports por su nuevo patrocinio con la compañía de videojuegos, ha estrechado sus lazos aún más con el régimen dictatorial de Arabia Saudí, que ya es sede de la Supercopa española desde el año 2020, al cerrar un acuerdo de patrocinio con Visit Saudí, la marca turística del país, que será destino turístico oficial de la competición española. Las cifras del acuerdo no han trascendido, pero según el medio especializado 2Playbook el acuerdo asciende a 20 millones de euros.
En un comunicado de prensa, La Liga destaca de Arabia Saudí el hecho de ser "el destino con un crecimiento más rápido en los últimos años, por su rico y cautivador patrimonio cultural, sus diversos paisajes y su papel como centro neurálgico de interacciones deportivas y culturales sin precedentes". El país cuenta a día de hoy con más de seis peñas oficiales de clubes de La Liga, destaca también el comunicado, que, en cambio, no menciona las numerosas violaciones de derechos humanos del régimen dictatorial, como por ejemplo la prohibición de la homosexualidad, la pena de muerte y los castigos corporales (cada vez menos frecuentes, eso sí).
En el comunicado se expresa también el embajador de la Liga Iker Casillas, que asegura que "el gran desarrollo del deporte y los eventos deportivos en Arabia Saudí suponen una oferta diferencial para el atractivo del destino, sumado su interés cultural y sus sorprendentes paisajes". "Seguro que esta nueva alianza será un éxito para conectar y atraer tanto a los aficionados al fútbol y al deporte en general, como a nuevos seguidores", añade Casillas.
La alianza da continuidad a un camino que se abrió al establecerse el país árabe como sede de la Supercopa en el año 2020. Con un paréntesis por el covid en 2021, a principios del próximo año la Supercopa volverá a disputarse con el nuevo formato en el que los dos finalistas de la Copa del Rey (Real Madrid y Osasuna) y los dos mejores equipos de la Liga (Barça y Atlético, que accede porque el Madrid lo hace como campeón de Copa). La celebración de la Supercopa en Arabia Saudí despertó un gran revuelo el año pasado después de que El Confidencial desvelase unos audios que mostraban cómo el aún jugador del Barça Gerard Piqué y el presidente de la Federación Española, Luis Rubiales, se habrían presuntamente repartido 24 millones de euros por el evento.
Cristiano y Neymar, dos atractivos más
La apuesta por el fútbol en Arabia Saudí se ha traducido también en inversiones millonarias por jugadores de fútbol que ya no son solo los que están en edades próximas a la jubilación. Así, en diciembre del año pasado Cristiano Ronaldo abrió el camino firmando un contrato de 200 millones de euros por temporada con el Al-Nassr, el salario más alto de toda la historia de este deporte. Tras él llegaron Karim Benzema, al Al Ittihad, N'Golo Kanté, Rubén Neves, Sadio Mané y, más recientemente, los ex barcelonistas Franck Kessié, por el que el A-Ahli pagó 15 millones al cuadro azulgrana, y Neymar, por el que el Al Hilal ha pagado 90 millones de euros y que percibirá un sueldo de 100 millones.
El director general ejecutivo de La Liga, Óscar Mayo, ha asegurado que la firma del acuerdo demuestra el "compromiso por el avance del deporte y la pasión del fútbol en el mundo árabe" y ha defendido el deporte y los viajes "como medio para conectar y unir culturas en todo el mundo". Fahd Hamidaddin, director general de la Autoridad Saudí de Turismo, ha asegurado por su parte que espera que los viajeros "experimenten el mayor intercambio deportivo y cultural de la historia del deporte" y que el acuerdo sirva para "llevar el mundo a Arabia Saudí y Arabia Saudí al mundo".
Más allá del patrocinio, la colaboración se dará con "una amplia gama de actividades, incluido un evento de lanzamiento de alto nivel" y otras actividades en el país que el comunicado no especifica, así como "contenido digital y eventos de inmersión" que mejoren la implicación de la audiencia de La liga.