Por falta de tenacidad no será. La Asociación Valenciana de Empresarios (AVE) ha vuelto a reclamar este lunes que se aceleren las obras del Corredor Mediterráneo ante los "incomprensibles" retrasos de esta obra que, en su diseño completo, prevé interconectar Almería con la frontera francesa vertebrando en alta velocidad todo el arco mediterráneo a través de Alicante, València, Tarragona y Barcelona. Para ello, el lobby que agrupa a las principales empresas de la Comunitat Valenciana por volumen de facturación, presidido por el naviero Vicente Boluda y con el presidente de Mercadona, Juan Roig, como uno de sus principales miembros, se ha desplazado de nuevo hasta la localidad alicantina de La Encina para alzar la voz y exigir la terminación de esta infraestructura.
La elección de La Encina para celebrar la última reunión de sus órganos de gobierno no es casual. AVE considera que la población alicantina es un lugar simbólico y por ello lo ha convertido en el epicentro de su reivindicación para que se agilice la ejecución del Corredor Mediterráneo desde que en 2016 puso en marcha el movimiento #QuieroCorredor. Este enclave es el nudo de comunicaciones ferroviarias clave para interconectar todas las capitales valencianas entre sí y, a su vez, para unir el sur y el norte de España por el litoral mediante una infraestructura acorde a los tiempos.
La organización empresarial denuncia que la terminación de esta parte de la obra en La Encina está tardando más de lo que técnicamente hubiera sido "deseable y posible". En ese sentido, recuerda que el Gobierno central prometió que las obras estarían acabadas a finales de 2022, pero entrado 2023 continúan sin estar terminadas. "Las obras avanzan, pero no al ritmo deseado", insiste Vicente Boluda.
Complemento de la España radial
AVE lleva años reivindicando el impulso del Corredor Mediterráneo por considerarlo una infraestructura clave y un eje prioritario para reforzar la competitividad del transporte de mercancías y viajeros "para contribuir a la generación de empleo y riqueza en España, complementando la España radial con la España circular".
Ya en 2016, cuando lanzaron la campaña reivindicativa #QuieroCorredor, dijeron que se podría acabar rápidamente la obra si se terminaba la nueva vía única que se estaba construyendo para comunicar la localidad valenciana de Xàtiva con La Encina en Alicante. Esa vía es necesaria para poder traspasar a ella todo el tráfico actual y así poder cambiar, sin necesidad de interrumpir el servicio de trenes actual, el ancho de la vía doble existente de ibérico a internacional, incluyendo el nudo de La Encina.
La vía en ancho internacional, pendiente de ejecutar
Esa vía única ya está terminada y se encuentra en fase de pruebas, pero la Agencia Española de Seguridad Ferroviaria aún no ha dado a conocer cuándo dará la aprobación preceptiva. Todos los contratos necesarios para las obras entre Xàtiva y La Encina, por la vía doble actual, desde el cambio al ancho internacional, pasando por la electrificación y la señalización están adjudicados y deberían ejecutarse a finales de 2024 o principios del 2025, pero todo depende de cuándo se inicien.
Cuando esté terminada, Alicante, València y Castellón quedarán unidas en ancho internacional y podrán seguir hacia la frontera francesa, pues todas las obras hacia el norte desde Xàtiva están ya ejecutándose. La previsión es que los trabajos, incluso los más retrasados, acaben en 2024 o 2025. Entonces, según prometió la ministra de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, en el acto empresarial reivindicativo del pasado noviembre en Barcelona, desde Lorca (Murcia) hasta la frontera francesa habrá ancho internacional y desde 2026, la conexión se extenderá hasta Almería.
El 34%, ya en servicio
A juicio de AVE, #QuieroCorredor nació como una iniciativa empresarial que ha logrado implicar a la sociedad civil de toda España en la reivindicación de esta infraestructura básica, como se demuestra en los actos multitudinarios que los empresarios han ido organizando en las diferentes ciudades protagonistas de ese corredor, el más reciente en Barcelona. Con ellos han logrado situar al Corredor Mediterráneo en el epicentro del debate político, considera AVE, lo que ha provocado que los líderes públicos asuman compromisos. "Vamos a continuar chequeando la ejecución para que las obras se acaben y que el Corredor Mediterráneo sea una realidad", insiste Boluda, quien subraya que desde el inicio del proyecto en 2016 ya está en servicio el 34% de los 1.300 kilómetros del trazado".
El Movimiento #QuieroCorredor tiene como compromiso analizar desde una perspectiva técnica y dos veces al año qué avances iba experimentando la infraestructura, lo que conoce como chequeos sobre el estado de la obra. El primero de esos Chequeos Semestrales de este año tendrá lugar el 3 de julio. Es mismo día se dará a conocer el documento actualizado con el estado de todos los tramos del Corredor Mediterráneo.
El Segundo Chequeo Semestral de 2023 está previsto para el 16 de noviembre en Madrid, en el Palacio Municipal de IFEMA, y coincidirá además con el VII Acto Empresarial por el Corredor Mediterráneo como los que tuvieron lugar en 2017 en Madrid; en 2018 en Barcelona; en 2019 en Elche; en 2020 en València; en 2021 en Madrid y el año pasado en Barcelona. La previsión es congregar de nuevo a más de 1.600 empresarios y representantes de la sociedad civil española.
La mitad de población, sin infraestructuras adecuadas
Posteriormente, tras celebrar en Murcia uno de sus plenos, el presidente de AVE criticó que no se dote de infraestructuras "adecuadas" a "una parte de España en la que vive prácticamente el 50% de la población, que supone el 51% de las exportaciones y el 50% del turismo extranjero". Vicente Boluda también incidió en la reforma del sistema de financiación autonómica, que "no admite más demora", ya que tanto Murcia como la Comunitat Valenciana son las regiones peor tratadas con el actual sistema.
"Sabemos que no es sencillo, pero no puede ser que los últimos tres Gobiernos de España dijesen antes de formarse que lo iban a abordar y/o solucionar, y ninguno de los tres haya tomado cartas en el asunto", expuso el naviero. Para Boluda, Murcia y Comunitat Valenciana deben "ayudar a que esa reforma se produzca, siendo solidarios con las circunstancias de otras regiones, pero dejando patente que es insostenible que, de forma continuada, haya territorios de primera y de segunda" que "pueden no tener la suficiente financiación para cubrir servicios básicos como la sanidad, la educación y los servicios sociales".